Es un fármaco indicado para aliviar los síntomas relacionados a problemas digestivos causados por algunos alimentos o la deglución de aire, como por ejemplo:
- Pesadez estomacal.
- Flatulencias o gases.
También es indicado como parte del tratamiento contra la insuficiencia exocrina pancreática, ya sea:
- Pancreatitis crónica.
- Fibrosis quística.
- Obstrucción del conducto biliar.
Administración del Zimeton
Debe ser ingerido según lo indique el empaque o folleto del medicamento o según lo indique el farmaceuta o médico tratante.
Se recomienda que no se excedan las dosis diarias recomendadas porque puede incrementar las posibilidades de padecer de los efectos secundarios. Su uso excesivo no hará que mejore la afección.
Puede ser ingerido después de cada comida, cuando comience el malestar o antes de ir a dormir.
En el caso de niños o bebés se recomienda utilizar la dosis en un gotero y colocar el liquido lentamente en su boca, justo en la parte interior de la mejilla para evitar que se pierda la dosificación. Se recomienda mezclar con 1 oz. de agua fría o formula infantil.
Efectos secundarios
Este medicamento no suele generar efectos secundarios de gravedad, sin embargo, el paciente debe suspender su uso si presenta los siguientes síntomas:
- Dolor abdominal.
- Vómito.
- Malestar estomacal.
- Mareos.
- Desmayos.
- Somnolencia.
En caso de intoxicación los síntomas pueden ser:
- Hormigueo en las extremidades del cuerpo.
- Tos repentina.
- Nauseas y vómitos.
- Erupción o ronchas en la piel.
- Dificultad para respirar.
- Sensación de debilidad.
- Mareos o falta del equilibrio.
- Dolor de cabeza.
- Temperatura corporal elevada sin presentar infección.
- Comezón excesiva en algunas zonas del cuerpo.
- Ojos llorosos.
- Inflamación en el rostro, específicamente alrededor de los ojos, pómulos, labios o garganta.
- Enrojecimiento en los pómulos.
- Desmayos.
- Desorientación.
- Somnolencia repentina o después de ingerir el medicamento.
El Zimeton podría generar reacciones alérgicas, por lo que el paciente deberá comunicarse con un médico si presenta todos o algunos de los siguientes síntomas:
- Ronchas, brote o salpullido en la piel.
- Inflamación localizada en la garganta, lengua, alrededor de los ojos o los labios.
- Dificultad para respirar.
- Enrojecimiento en el pecho, cuello, rostro y/o espalda.
- Dificultad para respirar con normalidad.
- Problemas para tragar, como por ejemplo la saliva.
- Ojos sensibles a la luz y llorosos.
- Ardor, sensibilidad o piquiña en la piel.
- Sensación de corriente u hormigueo en las extremidades del cuerpo.
Precaución
Se desconoce si el Zimeton genera reacciones adversas en el embarazo o desarrollo del embrión o feto, por lo que la paciente deberá comunicarle a su médico tratante que se encuentra en estado antes de comenzar el tratamiento para evitar inconvenientes a corto o largo plazo que perjudique al nonato.
Si la paciente se encuentra en período de lactancia es prudente que le consulte a su médico si puede utilizar Zimeton debido a que los componentes de este medicamento pueden pasar a la leche y a su vez al bebé cuando se alimente.
En algunos casos este medicamento podría generar somnolencia, es por ello que no se recomienda conducir maquinaria pesada o manejar en la noche después de ingerir Zimeton hasta que pase por lo menos un período prolongado de tiempo para asegurar si estos efectos pueden ser contraproducentes.
No se recomienda juntar bebidas alcohólicas con Zimeton, debido a que esto podría generar efectos adversos o contraproducentes para el individuo.
Las personas que padecen de ulceras estomacales, problemas digestivos, gastritis, cáncer de estómago u hernias, deben comunicarle a su médico tratante que sean utilizar Zimeton para que evalúe las circunstancias y le autorice o no su posología.
Las personas con edad avanzada son más propensos a padecer de los efectos secundarios, es por ello que deben seguir las indicaciones de su médico tratante y no utilizar dosis extras a pesar que la molestia o incomodidad no mejore.
Almacenamiento del Zimeton
Este medicamento no debe ser refrigerado, ni guardado en espacios que contengan humedad, calor o se encuentren expuestos a la luz solar. Debe mantenerse bajo una temperatura ambiente.
El Zimeton no puede estar al alcance de los niños o mascotas, debido a que su uso sin supervisión médica puede generar efectos nocivos para la salud de la persona o animal.
Si esto llegase a ocurrir, el afectado deberá ser llevado al centro de salud más cercano y comunicarse con un especialista para asegurar que se encuentre fuera de cualquier peligro.