Leucemia Linfática Crónica: Diferencias, Síntomas y Tratamiento Disponibles

tiene cura y tratamiento la leucemia linfocítica cronica

¿Qué es la Leucemia Linfocítica Crónica?

La Leucemia Linfocítica o Linfática Crónica (LLC) también conocida como leucemia linfoide crónica es un cáncer de sangre que se desarrolla cuando el cuerpo produce demasiados glóbulos blancos de forma anormal. Esto ocurre porque viven demasiado tiempo o se multiplican sumamente rápido, ocasionando que haya grandes cantidades circulando en la sangre.

Durante este proceso excluyen a los glóbulos blancos normales y no combaten las infecciones ellos mismos, por lo que puede haber un mayor riesgo de infección (neutropenia). A medida que la leucemia progresa, la médula ósea se llena de células leucémicas y hay menos espacio para que se produzcan glóbulos rojos y plaquetas saludables.

Esto puede causar diversos problemas de salud, como anemia (de muy pocos glóbulos rojos) o hemorragia o hematoma (por trombocitopenia, muy pocas plaquetas).

¿Cuál es la diferencia entre la leucemia crónica y aguda?

Todos los tipos de leucemia comienzan en la médula ósea y afectan la producción de glóbulos blancos. Se clasifican según el tipo de glóbulo blanco afectado (linfoide o mieloide), las anomalías en la médula ósea y la rapidez con la que se desarrolla la enfermedad.

La leucemia crónica generalmente afecta a las células parcialmente inmaduras, aparece gradualmente y se desarrolla de forma lenta durante meses o años.

La leucemia aguda afecta a las células completamente inmaduras, se produce de repente y se desarrolla rápidamente.

¿Quiénes padecen de LLC?

Cada año en Australia, aproximadamente 3700 personas son diagnosticadas con una forma de leucemia y más de 1700 de estos casos son leucemia crónica.

La leucemia linfocítica crónica es el tipo más común de leucemia crónica, con aproximadamente 1400 personas diagnosticadas cada año. Es dos veces más probable en hombres que en mujeres y es muy rara en niños.

¿Qué causa la Leucemia Linfática Crónica?

La leucemia linfocítica crónica es causada por cambios en uno o más de los genes (ADN) que controlan el crecimiento y desarrollo de las células sanguíneas. Estos cambios ocurren con el tiempo, pero no se sabe por qué ocurren en algunas personas y no en otras.

La causa exacta de la leucemia linfática crónica todavía se desconoce. Algunas personas tienen anomalías genéticas que pueden conducir a esta enfermedad, estos defectos genéticos generalmente no se heredan, pero hay casos poco frecuentes en los que la LLC puede aparecer con mayor reiteración en las familias.

Si le preocupa esto, hable con su médico, quien puede derivarlo a un asesor genético.

Células sanguíneas y leucemia

La sangre es bombeada alrededor de su cuerpo para proporcionarle a sus tejidos oxígeno y nutrientes, así como para eliminar los productos de desecho. Está formada por células sanguíneas que son transportadas por un fluido transparente llamado plasma.

Los tres tipos principales de células sanguíneas tienen funciones específicas:

  • Glóbulos rojos: transportan oxígeno por todo el cuerpo.
  • Glóbulos blancos: luchan contra la infección.
  • Plaquetas: ayudan a coagular la sangre.

Estas células sanguíneas tienen una vida útil limitada y deben reemplazarse continuamente.

La mayoría están hechas en la médula ósea, que es la parte esponjosa en el centro de los huesos y contiene células madre que son células sanguíneas no especializadas.

Dichas células madres primero se desarrollan en células inmaduras conocidas como células blásticas. Normalmente, las células blásticas se convierten en glóbulos maduros rojos o blancos. También pueden transformarse en plaquetas y llevan a cabo sus funciones establecidas.

Existen dos familias de células madre:

  • Células Madre Mieloide:se desarrollan en las células mieloblastos y luego en las células rojas de la sangre. Son la mayoría de los tipos de células blancas de la sangre y las plaquetas.
  • Células Madre Linfoides: se convierten en células linfoblásticas y luego en linfocitos, que son un tipo de glóbulo blanco.

Si las células de mieloblastos o linfoblastos no maduran adecuadamente o si hay demasiadas en la sangre, pueden causar leucemia.

En la leucemia, las células blásticas nunca se convierten en glóbulos blancos maduros. Cuando esto ocurre, se les denomina células de leucemia.

El sistema linfático

El sistema linfático funciona con los glóbulos blancos para proteger al cuerpo de infecciones. Una gran red de tubos delgados (vasos linfáticos) lleva un líquido claro llamado linfa.

La linfa viaja hacia y desde áreas del tejido linfático, incluidos los ganglios linfáticos, el bazo y el hígado. Cuando la leucemia hace que se acumulen glóbulos blancos anormales, el tejido linfático se inflama.

Los ganflios linfáticos: son estructuras pequeñas en forma de frijol que se encuentran en el cuello, las axilas, el pecho, el abdomen y la ingle. Estos filtran toxinas y ayudan a combatir infecciones. También producen algunas células sanguíneas.

Bazo: este es un órgano en el lado izquierdo del cuerpo debajo de las costillas. Elimina las células sanguíneas viejas o dañadas.

Hígado: este órgano grande elimina toxinas, controla los niveles de azúcar y almacena vitaminas.

Síntomas de la LLC

La leucemia linfocítica crónica por lo general no causa ningún síntoma desde el principio y solo se puede tomar durante un  análisis de sangre realizado por otra razón.

Cuando los síntomas se desarrollan, pueden incluir:

  • Contraer infecciones a menudo.
  • Sangrado y hematomas con más facilidad de lo normal.
  • Una temperatura alta (fiebre).
  • Sudores nocturnos.
  • Glándulas hinchadas  en el cuello, axilas o ingle.
  • Hinchazón y malestar en su estómago.
  • Pérdida de peso involuntaria.

Debe visitar a su médico si tiene síntomas persistentes o preocupantes. Estos síntomas pueden tener otras causas además del cáncer, pero es una buena idea que se revisen.

Tratamiento

El tratamiento para la leucemia linfocítica crónica depende en gran medida del estadio en que se encuentre la afección cuando se diagnostica. Es posible que solo necesite que lo vigilen al principio si lo detectan desde el comienzo.

Por otra parte si es está en etapa más avanzada, entonces la quimioterapia es el tratamiento principal que a menudo puede ayudar a mantener la leucemia linfocítica crónica bajo control por muchos años.

Puede desaparecer después del tratamiento inicialmente (lo que se llama remisión) pero generalmente reaparecerá unos meses o años después y es posible que deba tratarse de nuevo (a esto se le conoce como recidiva).

Etapas de la Leucemia Linfocítica Crónica

Los médicos se refieren a «etapas» para describir cuán lejos se ha desarrollado la leucemia linfática crónica y ayudarlos a determinar cuándo es necesario tratarla.

Hay tres etapas principales:

  • Etapa A: tiene ganglios linfáticos agrandados en menos de tres áreas (como el cuello, la axila o la ingle) y un recuento alto de glóbulos blancos.
  • Etapa B: tiene ganglios linfáticos agrandados en tres o más áreas y un recuento alto de glóbulos blancos.
  • Etapa C: tiene glándulas linfáticas agrandadas o un bazo agrandado, un recuento alto de glóbulos blancos y un recuento bajo de glóbulos rojos o plaquetas.

Las etapas B y C generalmente se tratan de inmediato. Por lo general, la etapa A solo necesita tratamiento si empeora rápidamente o comienza a causar síntomas.

Monitoreo de LLC en etapa temprana

El tratamiento puede no ser necesario si no tiene ningún síntoma cuando se le diagnostica leucemia linfática crónica.

Esto es porque:

  • Como ya se ha dicho antes, la LLC a menudo se desarrolla muy lentamente y puede no causar síntomas durante muchos años.
  • No hay beneficio en comenzar el tratamiento temprano.
  • El tratamiento puede causar efectos secundarios significativos.

En estos casos, normalmente solo necesitará visitas regulares a su médico y análisis de sangre para controlar la afección.

El tratamiento con quimioterapia generalmente solo se recomendará si desarrolla síntomas o las pruebas muestran que la afección empeora.

Quimioterapia para Leucemia Linfática Crónica más avanzada

Muchas personas con LLC eventualmente necesitarán recibir quimioterapia. Esto implica tomar medicamentos para mantener el cáncer bajo control.

Existen varios medicamentos diferentes para la leucemia linfática crónica, pero la mayoría de las personas tomarán tres medicamentos principales en ciclos de tratamiento que durarán 28 días. Estos medicamentos son:

  • Fludarabina: generalmente se toma como una tableta de tres a cinco días al comienzo de cada ciclo de tratamiento.
  • Ciclofosfamida: también usualmente se toma como una tableta de tres a cinco días al comienzo de cada ciclo de tratamiento.
  • Rituximab: es administrado en una vena durante unas pocas horas (infusión intravenosa) al comienzo de cada ciclo de tratamiento.

La fludarabina y la ciclofosfamida generalmente pueden tomarse en casa. Rituximab se administra en el hospital y en ocasiones, es posible que deba permanecer en el hospital durante la noche.

También se pueden probar otros diferentes medicamentos si no puede tomar los anteriormente mencionados, si los ha probado pero no han funcionado o si su LLC ha regresado después del tratamiento.

Estos incluyen bendamustina, clorambucilo, ibrutinib, idelalisib, obinutuzumab, ofatumumab y prednisolona.

Efectos secundarios de este tratamiento

Los medicamentos utilizados para tratar la leucemia linfocítica crónica pueden causar algunos efectos secundarios importantes, que incluyen:

  • Cansancio persistente.
  • Sentirse enfermo.
  • Un mayor riesgo de infecciones.
  • Moretones o sangrado fácil.
  • Pérdida de cabello o adelgazamiento.
  • Un latido cardíaco irregular
  • Reacciones alérgicas.

La mayoría de los efectos secundarios pasarán una vez que finalice el tratamiento. Informe a su equipo de atención si experimenta algún efecto secundario, ya que hay algunos tratamientos que pueden ayudar.

Trasplantes de células madre o de médula ósea

Los trasplantes de células madre o de médula ósea a veces se usan para tratar de eliminar completamente la leucemia linfocítica crónica o controlarla por períodos más largos de tiempo.

Un trasplante de células madre implica:

  • Recibir altas dosis de quimioterapia y radioterapia para destruir las células cancerosas en su cuerpo.
  • Eliminar las células madre de la sangre o de la médula ósea de un donante; idealmente, se tratará de alguien cercano a usted, como un hermano.
  • Trasplantar las células madre del donante directamente en una de sus venas.

Esta es la única cura posible para la leucemia linfática crónica, pero no se aplica con mucha frecuencia ya que es un tratamiento intensivo y muchas personas con la enfermedad son mayores y no están en buenas condiciones como para que los beneficios superen los riesgos.

El tratamiento inicial con quimioterapia y radioterapia puede ejercer una presión significativa sobre su cuerpo y causar efectos secundarios problemáticos.

También existe el riesgo de problemas graves después del trasplante, como la enfermedad del injerto contra el huésped en la cual, las células trasplantadas atacan a las otras células de su cuerpo.

Otros tratamientos para Leucemia Linfocítica Crónica

También hay otros tratamientos que a veces se usan para ayudar a tratar algunos de los problemas causados por la LLC, particularmente si no puede recibir quimioterapia o si la misma no funciona.

Éstas incluyen:

  • Radioterapia para reducir el tamaño de las glándulas linfáticas o un bazo inflamado.
  • Cirugía para extirpar un bazo hinchado.
  • Antibióticos, antifúngicos y medicamentos antivirales para ayudar a reducir el riesgo de contraer una infección durante el tratamiento.
  • Transfusiones de sangre  para proporcionar más glóbulos rojos y plaquetas (células de coagulación) si experimenta anemia severa o problemas de sangrado y moretones.
  • Terapia de reemplazo de inmunoglobulina: una transfusión de anticuerpos tomados de sangre donada que puede ayudar a prevenir infecciones.
  • Inyecciones de medicamentos llamadas factor estimulante de colonias de granulocitos (FSC-G) para ayudar a aumentar la cantidad de glóbulos blancos.

Es posible que también necesite tratamiento adicional para cualquier complicación de la enfermedad que se desarrolle.

Decidir en contra del tratamiento

Como muchos de los tratamientos para la leucemia Linfática crónica pueden tener efectos secundarios desagradables que pueden afectar su calidad de vida, puede optar por no tener un tipo particular de tratamiento.

Esta es su decisión y su equipo de tratamiento respetará cualquier decisión que tome. No se apresure a decidir sobre su tratamiento, y antes de tomar una decisión puede hablar con su médico, pareja, familiares y amigos. El alivio del dolor y la atención de enfermería seguirán estando disponibles cuando lo necesite.

Ensayos clínicos para LLC

Actualmente se están llevando a cabo varios ensayos clínicos en el Reino Unido para tratar de encontrar la mejor forma de tratar la leucemia linfocítica crónica. Estos son estudios que usan técnicas nuevas y experimentales para ver qué tan bien funcionan en el tratamiento y posiblemente en la curación de la afección.

Si está interesado en participar en un ensayo clínico, su equipo de atención puede indicarle si hay alguno llevándose a cabo en su área y explicar los beneficios y riesgos involucrados.