Constituye un subgrupo de una categoría más amplia de tumores epiteliales conocidos como carcinomas.
Los adenocarcinomas se definen como tumores epiteliales malignos con diferenciación glandular o producción de mucina por parte de las células tumorales. Sus homólogos benignos son conocidos como adenomas.
Los carcinomas son la forma más frecuente de tumores humanos (aproximadamente el 80% de todas las neoplasias malignas no cutáneas) y los adenocarcinomas son la forma más común de carcinomas.
Los carcinomas pueden surgir en prácticamente cualquier órgano que contenga epitelio glandular o secretor, y los sitios más frecuentes incluyen pulmón, riñón, tracto gastrointestinal, mama y próstata.
En algunos órganos, como colon-recto, mama y riñón, casi todos los carcinomas son adenocarcinomas, mientras que en otros órganos como el pulmón, solo una parte de los carcinomas son adenocarcinomas.
Al igual que con otras neoplasias malignas epiteliales, los adenocarcinomas suelen ir precedidos de una serie de lesiones preneoplásicas identificables histopatológicamente.
Los cambios moleculares generalmente se pueden detectar durante el largo proceso preneoplásico y pueden estar presentes en el epitelio de apariencia histológicamente normal.
Debido a que los adenocarcinomas pueden surgir de múltiples estructuras y órganos diversos, su patogénesis molecular varía considerablemente.
Ubicaciones de un adenocarcinoma
El adenocarcinoma es un cáncer que se forma en las glándulas secretoras de moco en todo el cuerpo.
Las glándulas producen los líquidos que el cuerpo necesita para mantenerse húmedo y trabajar bien.
Cuando un adenocarcinoma de las células en las glándulas que recubren los órganos crecen fuera de control, pueden propagarse a otros lugares y dañar el tejido sano.
La enfermedad puede desarrollarse en muchos lugares diferentes, pero es más frecuente en los siguientes tipos de cáncer:
Colon y recto
El adenocarcinoma es el tipo más común de cáncer de colon. Comienza como un pequeño pólipo, o crecimiento, que generalmente es inofensivo al principio pero puede convertirse en cáncer.
La enfermedad también puede comenzar en el recto, la parte del intestino grueso donde los desechos sobrantes de los alimentos digeridos, llamados heces, son expulsados de su cuerpo.
Las mamas
La mayoría de los cánceres de los senos son adenocarcinomas. Comienzan en las glándulas de las mamas donde se produce la leche.
El esófago
Este es el tubo que lleva la comida desde la boca hasta el estómago. El adenocarcinoma generalmente comienza en las glándulas mucosas que recubren la parte inferior del esófago.
El cáncer que se forma en las células glandulares del esófago se conoce como adenocarcinoma. Este es el tipo más común de cáncer de esófago.
Pulmones
El adenocarcinoma constituye aproximadamente el 40% de los cánceres de pulmón.
Se encuentra con mayor frecuencia en la parte externa de los pulmones y crece más lentamente que otros tipos de cáncer de pulmón .
Por lo general, este tipo de cáncer se obtiene si la persona es fumadora activa o pasiva o solía serlo.
Páncreas
Este es un órgano en la parte posterior del vientre, detrás del estómago y es el encargado de producir hormonas y enzimas que ayudan a digerir los alimentos.
Alrededor del 85% de los los tumores de cáncer pancreático exocrino son causados por un adenocarcinoma y representa el tipo más común. Estos tumores comienzan en los conductos de este órgano.
Próstata
Esta es una glándula que poseen los hombres y que está justo debajo de la vejiga y ayuda a producir parte del fluido que protege a las células espermáticas.
El adenocarcinoma usualmente comienza en las células que producen estos fluidos.
El cáncer que se forma en la glándula prostática es generalmente un adenocarcinoma, que representa el 99 por ciento de todos los cánceres de próstata.
Un adenocarcinoma también puede desarrollarse en otras partes del cuerpo.
Diagnóstico del adenocarcinoma
Las pruebas de diagnóstico varían de acuerdo con la ubicación del cáncer. Al diagnosticar el adenocarcinoma, se pueden realizar las siguientes pruebas:
Biopsia
Es la extracción de una muestra de tejido anormal en el cuerpo, que será examinado a través de un microscopio para determinar la existencia de células cancerosas.
Si es así, se puede usar una biopsia para determinar si el cáncer se originó en el sitio de la biopsia o en otra parte del cuerpo.
Tomografía computarizada
Este es un procedimiento de rayos X que usa una computadora para tomar imágenes detalladas y tridimensionales de tejido anormal en el cuerpo.
Las tomografías computarizadas también se realizan durante el tratamiento para ver si el cáncer está respondiendo al tratamiento.
Imágenes de resonancia magnética
Las resonancias magnéticas utilizan ondas de radiofrecuencia para crear imágenes detalladas de cortes transversales de diferentes partes del cuerpo.
Tratamiento del adenocarcinoma y opciones de terapia
El tratamiento para el adenocarcinoma varía según el lugar donde crece en el cuerpo, pero puede incluir:
Cirugía
El adenocarcinoma a menudo se trata mediante la extirpación quirúrgica del tejido glandular canceroso, así como de algunos tejidos circundantes.
Los métodos quirúrgicos mínimamente invasivos pueden ayudar a reducir el tiempo de curación y reducir el riesgo de infección después de la cirugía.
Radioterapia
Esta opción de tratamiento de adenocarcinoma se usa generalmente en combinación con cirugía y / o quimioterapia.
Las terapias de radiación avanzadas utilizan la guía de imagen antes y durante el tratamiento para tratar los tumores de adenocarcinoma como parte de un proceso diseñado para preservar los tejidos sanos y los órganos circundantes.
Quimioterapia
La quimioterapia trata el adenocarcinoma con medicamentos diseñados para destruir las células cancerosas, en todo el cuerpo o en un área específica.
Algunos medicamentos de quimioterapia pueden matar tanto el cáncer como las células sanas. Otros medicamentos más nuevos pueden apuntar solo a las células cancerosas.
El tratamiento contra el cáncer puede tener efectos secundarios. Es posible que el paciente se sienta muy cansado o sienta que necesita vomitar.
El médico puede sugerir formas de manejar estos problemas, prescribiendo medicamentos que combaten las náuseas.
Hablar con la familia y los amigos sobre cómo el paciente se siente, plantearles las preocupaciones y temores., es de gran ayuda mientras se recibe tratamiento y puede ser una gran fuente de apoyo.
