Feocromocitoma: Factores de Riesgo, Causas, Síntomas, Diagnóstico, Tratamiento, Complicaciones y Panorama

glándulas suprarrenales

Es un raro tumor ubicado en las glándulas suprarrenales, las cuales están situadas encima de los riñones.

Las glándulas suprarrenales producen varias hormonas, como la aldosterona, testosterona, cortisol, norepinefrina y epinefrina, quienes son las encargadas de regular las funciones corporales vitales.

Estas funciones corporales son la presión arterial, el estrés, el azúcar en la sangre, la respuesta inmunitaria, el metabolismo y la frecuencia cardíaca.

El feocromocitoma es raramente canceroso, pero puede ser peligroso debido a la fluctuación de los niveles hormonales.

Factores de riesgo

Se cree que el feocromocitoma puede estar vinculado a las condiciones en las que la hipoxia (suministro de oxígeno reducido) sucede. Éstos incluyen:

  • Hipertensión grave (presión arterial alta).
  • Cardiopatía congénita.

Esta patología se puede desarrollar a cualquier edad, pero es más común desde principios hasta mediados de la edad adulta.

Causas del feocromocitoma

La investigación reciente indica que puede ser hereditario. Eso significa que se transmite de padres a hijos.

Los pacientes que heredan el feocromocitoma de sus padres también pueden sufrir de condiciones genéticas asociadas. Estas condiciones incluyen:

  • La enfermedad de Von Hippel-Lindau (VHL): es una condición en la que los quistes y los tumores crecen en el sistema nervioso central, el cerebro, los riñones, las glándulas suprarrenales, o de otras áreas del cuerpo.
  • La neurofibromatosis 1 (NF1): el desarrollo de tumores en la piel y el nervio óptico.
  • Neoplasia endocrina múltiple tipo II (NEM): es una forma de cáncer de la tiroides que se desarrolla en conjunto con el feocromocitoma.

El feocromocitoma puede estar asociado con la enfermedad cardíaca congénita. Las enfermedades del corazón pueden causar hipoxia que contribuye a esta enfermedad.

Síntomas

Son el resultado de la producción de hormonas en exceso y la liberación de las mismas.

Un gran aumento repentino de hormonas adrenales se denomina crisis adrenérgica (CA), la cual produce hipertensión y taquicardia (frecuencia cardíaca rápida).

Los síntomas más comunes son:

  • Aparición episódica y repentina de fuertes dolores de cabeza.
  • Transpiración.
  • Dolor abdominal.
  • Hipertensión (presión sanguínea alta) que pueden ser resistentes a los medicamentos convencionales.
  • Frecuencia cardíaca rápida.
  • Irritabilidad y ansiedad.

Diagnóstico del feocromocitoma

El diagnóstico ha mejorado con la tecnología moderna. Sin embargo, es todavía difícil de realizarlo. Si presenta síntomas, el médico puede ordenar exámenes. Éstos incluyen

  • Pruebas de imagen para buscar tumores.
  • Imágenes por resonancia magnética.
  • Pruebas de laboratorio para evaluar los niveles de hormonas.
  • Plasma de sangre (prueba de los niveles de catecolaminas y metanefrinas).
  • Prueba de orina (pruebas de los niveles de catecolaminas y metanefrinas que pueden haber pasado por alto en el análisis de sangre).

Tratamiento para el feocromocitoma

El mejor tratamiento es la cirugía, a pesar de ser un procedimiento delicado. Sin amplia preparación del paciente, puede ser potencialmente mortal.

Los médicos preparan al paciente a través de:

  • Discutir todos los medicamentos existentes, ya que algunos pueden interferir con el feocromocitoma durante la cirugía.
  • Los pacientes después de la cirugía pueden tener problemas a corto plazo con la regulación de la hormona suprarrenal.
  • Los esteroides pueden sustituir el funcionamiento adecuado de estas glándulas, hasta que esta reinicie su función normal.

La extirpación del tumor se hace con mayor frecuencia mediante métodos laparoscópicos no invasivos, que requieren solo pequeñas incisiones.

Los beneficios de estos métodos son un tiempo de recuperación más corto y una menor posibilidad de complicaciones de la cirugía.

En los días previos a la cirugía, es posible que la persona con feocromocitoma tenga que tomar medicamentos para equilibrar su ritmo cardíaco y disminuir su presión arterial.

En la mayoría de los casos de feocromocitoma, un tumor crece en una sola glándula suprarrenal.

En estas situaciones, los médicos pueden extirpar toda la glándula, ya que la glándula restante es capaz de producir las hormonas que el cuerpo necesita para sobrevivir.

Cuando una persona tiene tumores en ambas glándulas suprarrenales, los médicos intentarán extirpar el tejido tumoral solo, dejando una parte de las glándulas intacta.

Si esto no es posible, es probable que tengan que extirpar ambas glándulas suprarrenales. Con los tumores benignos, la extirpación del tumor generalmente hará que los síntomas desaparezcan.

Las personas a quienes se les extirpan ambas glándulas suprarrenales necesitarán tomar esteroides para ayudar a reemplazar las hormonas que el cuerpo ya no puede producir.

Las personas que tienen tumores cancerosos pueden requerir radiación o quimioterapia para evitar que el tumor regrese o se disemine.

Complicaciones

Es probable que todas las personas con feocromocitoma experimenten complicaciones.

Sin embargo, las personas con feocromocitoma que no reciben tratamiento corren un mayor riesgo de desarrollar problemas cardíacos, como presión arterial alta, latidos cardíacos irregulares y ataque cardíaco.

También es más probable que experimenten insuficiencia orgánica y daños en el nervio óptico.

La cirugía viene con sus propias complicaciones. Algunas afecciones pueden desarrollarse durante la cirugía, como crisis de presión arterial alta, crisis de presión arterial baja y latidos cardíacos irregulares.

La cirugía también implica alterar las glándulas suprarrenales, lo que puede causar un desequilibrio en las hormonas. La mayoría de las personas recibirán esteroides durante la recuperación para ayudar a equilibrar estas hormonas.

Panorama

El feocromocitoma puede ser grave si no se trata. Los síntomas pueden ser potencialmente mortales y requieren atención médica.

Una vez que se extrae el tumor, los síntomas generalmente desaparecen, lo que resulta en una recuperación completa.

La cirugía puede ser difícil. Los tumores cancerosos también pueden requerir tratamiento adicional, y la tasa de supervivencia en estos casos puede ser menor.

Cualquier síntoma o síntoma nuevo que persista debe ser discutido con un médico.