Parénquima: Definición, Función, Tipos e Implicación En El Proceso Cancerígeno

Se define o se utiliza como un término implementado para describir los tejidos funcionales de todo ser vivo o que contenga células en el planeta.

La palabra «parénquima» proviene de una palabra griega para «verter» o «llenar», que representa la idea de que las células parenquimatosas que son la mayor parte de los tejidos funcionales en las plantas, los animales y de los seres humanos.

Además, este tejido es funcional porque realiza tareas tales como fotosíntesis en plantas o el almacenado de información en el cerebro humano, en oposición a tejidos «estructurales» como madera en plantas o hueso en animales y personas.

En los seres humanos, el parénquima es mucho más variado. Se refiere a las células que realizan la función biológica del órgano, como las células pulmonares que realizan el intercambio gaseoso, las células hepáticas que limpian la sangre o las células cerebrales que realizan las funciones del cerebro para su buen desempeño.

El parénquima en los tejidos del riñón realiza la función de filtrar la sangre que transcurre por ellos, excluyendo solo las membranas protectoras y los vasos que transportan fluidos, porque sirven para dirigir la sangre y la orina dentro y fuera del riñón cuando termina el proceso de depuración.

Implicación en el proceso cancerígeno

Otra definición de parénquima tiene lugar en el desarrollo del cáncer y otros crecimientos anormales en el organismo o cuerpo humano, como lo son las tumoraciones malignas o benignas.

En conclusión, cuando se habla de parénquima en el proceso cancerígeno, se define como el coautor del tejido patológico que produce el crecimiento, por lo que es capaz de expandirse y reproducirse sin limitaciones, lo que deteriora en este caso la salud del afectado si no se detecta a tiempo dicha anomalía.

Función del parénquima

Debido a que «parénquima» es un término genérico para todas las células que realizan funciones biológicas no estructurales, las acciones de las células parenquimatosas son muchas, como por ejemplo:

En las plantas, las células parenquimatosas con paredes celulares delgadas y la capacidad de reproducir cumplen funciones que incluyen:

  • Fotosíntesis.
  • El intercambio de gases.
  • Almacenamiento de alimentos.
  • Reparación de heridas.
  • Secreción de savia.

En los animales, las células «parenquimatosas» se refieren a las células funcionales en cada órgano. Eso significa que casi todas las funciones realizadas en el cuerpo de un animal son realizadas por células parenquimatosas.

Algunas de estas funciones que se pueden enumerar son como por ejemplo:

  • Sistema nervioso: los parénquimas en el sistema nervioso ayudan con lo que sería la percepción, el hilo de los pensamientos, el almacenamiento y procesamiento de la información recibida cotidianamente, entre otros.
  • Sistema de respiración: en el proceso de respiración ayuda a los pulmones con el intercambio de gases.
  • Sistema linfático: los parénquimas tienen como función la producción de células inmunes en el sistema linfático.
  • Secreción de hormonas: permiten que el páncreas, los diversos órganos reproductivos, el cerebro, las glándulas suprarrenales, entre otros, segreguen las hormonas necesarias para el buen funcionamiento del organismo.
  • Filtrado de sangre: esto ocurre en el funcionamiento de los riñones.
  • Descomponer toxinas: los parénquimas intervienen en el proceso del hígado cuando descompone las toxinas del cuerpo.

Tipos

Existen diversos tipos de parénquima, tanto para las plantas como para los órganos de los animales y humanos. En el caso de las personas se pueden enumerar los siguientes:

Parénquima de órganos

En las personas, las células que realizan la función primaria del órgano de las células «estructurales» sirven principalmente para proteger o dar forma al parénquima.

Es por ello que prácticamente todas las funciones que se realizan dentro del cuerpo de un individuo, excepto las funciones estructurales y de protección, son realizadas por células parenquimatosas.

Las células duras y calcificadas en los huesos y las membranas protectoras alrededor de la mayoría de los órganos se denominan como las células «estructurales”.

Parénquima tumoral

Cuando se habla de cáncer u otros crecimientos anormales en el organismo, el término «funcional» también es útil para analizar el parénquima.

El parénquima de un tumor u otro crecimiento se considera la parte «neoplásica» que es capaz de dividir las células que forman o componen dicha anomalía mutante.

Lo que significa o permite que el parénquima sirva para la «función» patológica que genera  la propagación y crecimiento prolongado de las tumoraciones que genera el cáncer sin distinción de zonas u órganos en el cuerpo del afectado.

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