Sin las curvaturas adecuadas en su columna vertebral, no tiene la absorción de impactos para la que fue diseñada y corre el riesgo de una degeneración prematura.
¿Qué problemas puede causar una curva no saludable?
Muchos pacientes experimentan frecuentes dolores de cabeza o migrañas, y en ocasiones está directamente relacionado con la curva del cuello.
Los pacientes típicos con cefalea o migraña tendrán un cuello recto (hipolordótico/alordótico) o una curvatura inversa (cifótica), muchos pacientes han estado lidiando con estos síntomas durante años con poco o ningún alivio.
¿Cómo puede ayudar la quiropráctica para la rectificación cervical?
Ciertos ajustes quiroprácticos y ejercicios y terapias de apoyo están diseñados para recuperar la curva ideal (lordótica). Para la gran mayoría de los pacientes sin curvatura lordótica, estos tratamientos han provocado que la mayoría de los dolores de cabeza se disipen, si no desaparecen del todo.
Las mejores recomendaciones
Visite a su quiropráctico para un examen y radiografías de su columna cervical; siga de cerca sus recomendaciones para su plan de atención y ¡apéguese a ellas! Puede comenzar a sentirse mejor de inmediato, lo cual es genial, pero la corrección de la columna requiere tiempo y necesitará un mantenimiento regular.
Sea consciente de su postura en todo momento (piense: sentado, conduciendo, enviando mensajes de texto, de pie, etc.). Si tiene una mala postura, su curvatura puede cambiar fácilmente de una curva saludable a una curva problemática.
Siéntate y ponte de pie con los hombros hacia atrás y observa que no estás empujando la cabeza hacia adelante, tus orejas deben alinearse verticalmente con tus hombros.
Si bien puede ser cómodo, dormir boca abajo no es bueno para el cuello o la espalda; con el tiempo, esta posición puede hacer que cambien las curvaturas espinales. Pregúntele a su quiropráctico cuál es la mejor posición para dormir y tipo de almohada para usted.
Mira cómo trabajas! Si a menudo está sentado en un escritorio, preste atención a cómo se configura su espacio de trabajo y cómo lo usa.
Su monitor debe sentarse directamente frente a usted y elevarse aproximadamente 3 pulgadas más alto que el nivel de los ojos (nunca debe mirar hacia abajo a su pantalla), sus pies deben poder descansar planos sobre el suelo (obtener un pequeño escabel si es necesario) y nuevamente, asegúrese de estar sentado con los hombros hacia atrás.
Evite tener su billetera en su bolsillo trasero, esto puede crear un desequilibrio, colóquela en su bolsillo delantero o retírela cuando se siente. Y si llevas un bolso pesado, compra uno con una correa que pase por el pecho y cambia de lado de vez en cuando.
Tratamientos para el dolor cervical
Aliviar el dolor, la rigidez y la tensión en el cuello puede ir desde simples tratamientos a corto plazo, como descanso, hielo, compresión y elevación, o remedios para el dolor de venta libre, hasta terapias continuas a largo plazo, como liberación miofascial o ejercicios regulares para mantener flexible la estructura del cuello.
Todos conocemos los riesgos cada vez mayores de los medicamentos, por lo que estamos mejor con otros tratamientos.
Descanso, hielo, compresión y elevación es casi siempre un tratamiento de primera línea para la lesión de tejidos blandos. El reposo, el hielo, la compresión y la elevación continúan siendo terapéuticos en la mayoría de los procesos de curación.
Terapia física: un fisioterapeuta puede enseñarle a corregir ejercicios de postura, alineación y fortalecimiento del cuello, y puede usar calor, hielo, estimulación eléctrica y otras medidas para ayudar a aliviar su dolor y prevenir una recurrencia.
Liberación miofascial: masajear el cuello con regularidad es muy útil para reducir el dolor, la rigidez y la movilidad limitada. Simplemente no suceden cuando tratas el dolor de cuello tan pronto como lo notas.
Tracción cervical: este es el estiramiento del cuello a menudo realizado por osteópatas y otros trabajadores del cuerpo. También puede hacerlo en casa, el objetivo de la tracción del cuello, ya sea que se haga con las manos de un terapeuta, una toalla o un dispositivo especial, es la descompresión de las vértebras.
Ejercicios en casa: comience a hacer estiramientos diarios suaves, incluidos los rollos para el cuello y los hombros, una vez que se haya calmado lo peor de su dolor. Suavemente incline, doble y gire su cuello. Su médico o un fisioterapeuta pueden instruirlo para realizar estos ejercicios.
Terapia de luz: la fotoestimulación es una terapia no invasiva que utiliza luz o energía de luz infrarroja cercana que hace que los tejidos en el cuerpo muestren respuestas bioquímicas complejas específicas, esencialmente curando los tejidos lesionados.
La tecnología está siendo utilizada en forma de láser y LED por fisioterapeutas y especialistas en medicina deportiva para tratar una amplia variedad de lesiones musculoesqueléticas agudas y crónicas y dolor.
Ejercicios para el dolor de cuello: el ejercicio es medicina. Cada vez más, vemos que los médicos remiten pacientes de dolor de cuello a fisioterapeutas, entrenadores personales y especialistas en acondicionamiento físico para que los alivien aliviando los síntomas.
La razón es porque funciona: ¡el cuerpo está diseñado para el movimiento!
Conexión a tierra: no hay nada nuevo acerca de los beneficios de conectarse con la tierra, excepto que ahora tenemos pruebas científicas de sus méritos. Todos necesitamos ‘volver a la naturaleza’ para mejorar nuestro bienestar general, así como para tratar el dolor.
Microcorriente: los dispositivos electromédicos son una terapia de dolor efectiva y no invasiva que se puede usar con la frecuencia necesaria y proporcionar un alivio considerable.
El uso de la estimulación eléctrica para tratar el dolor se remonta a la Antigua Roma, cuando se paraban sobre los peces eléctricos en la orilla del mar; afortunadamente, el método ha mejorado mucho, pero incluso Benjamin Franklin respaldó el uso de la estimulación eléctrica para tratar el dolor. Es el futuro de la medicina.
Watsu: esta terapia acuática es un tratamiento relativamente nuevo realizado por un profesional certificado que acuna el cuerpo a medida que se mueve y se estira a través del agua.
Si tienes la suerte de tener un practicante de Watsu en tu área, échale un vistazo. De lo contrario, simplemente flotar en un charco de agua o incluso en la bañera puede proporcionar alivio.
Actitud: por último, pero lejos de ser lo menos importante y tan efectivo como cualquier otro tratamiento para el dolor, es nuestra actitud. El pensamiento positivo no es una trivialidad o disposiciones alegres, nos dice la ciencia.
Estudios recientes indican que la capacidad de usar pensamientos para regular las percepciones de dolor emplea una vía diferente en el cerebro que la ruta utilizada para enviar señales de dolor al cerebro.
Esto explica cómo podemos seguir adelante a veces, a pesar del dolor físico. Los científicos lo llaman autorregulación cognitiva; los que sufren de dolor crónico lo llaman nada menos que un milagro.
