Es una especie no patógena de Entamoeba que existe frecuentemente como un parásito comensal en el tracto gastrointestinal humano.
Diagnóstico diferencial de la Entamoeba coli
El diagnostico diferencial de la Entamoeba coli es importante en la medicina porque durante el examen microscópico de muestras de heces teñidas puede confundirse con el patógeno Entamoeba histolytica.
Esta ameba no se mueve mucho con el uso de su pseudópodo, y crea un movimiento de lugar (no progresivo) dentro del intestino grueso. Por lo general, la ameba es inmóvil y mantiene su forma redonda.
Esta ameba, en su etapa de trofozoíto, solo es visible en muestras de heces frescas y no fijadas.
A veces, la Entamoeba coli también tiene parásitos. Uno es el hongo Sphaerita spp, este hongo vive en el citoplasma de la E. coli.
Si bien esta diferenciación suele realizarse mediante el examen visual de los quistes parásitos mediante microscopía óptica, se han desarrollado nuevos métodos que utilizan técnicas de biología molecular.
El nombre científico de la ameba, E. coli, a menudo se confunde con la bacteria Escherichia coli. A diferencia de la bacteria, la ameba es mayormente inofensiva y no causa tantos problemas intestinales como algunas cepas de la bacteria Escherichia coli.
Algunas de estas cepas dañinas se encuentran dentro de la carne cruda que se consume.
Así por ejemplo, la bacteria Escherichia coli O157: H7 , que puede causar enfermedades e incluso la muerte, si se ingiere.
Para hacer que la denominación de estos organismos sea menos confusa, se usan «contracciones alternativas» para nombrar a la especie con el propósito de facilitar la denominación.
Por ello se utiliza Esch. coli y Ent. coli para la bacteria y la ameba respectivamente, en lugar de usar E. coli para ambos.
Significación clínica
Con la presencia de Entamoeba coli por sí misma, los médicos no recomiendan un tratamiento, porque se estima inofensiva.
Sin embargo, con la infestación con esta entamoeba benigna, también se pueden introducir otros organismos patógenos, y estos otros patógenos pueden causar infecciones o enfermedades.
Morfología
Todas las especies de entamoeba vienen en formas monogenéticas o tienen ciclos de vida de una generación.
La Entamoeba coli tiene «tres formas morfológicas distintas en cada ciclo de vida: trofozoíto, etapa prequística y etapa quística».
Este ciclo de vida da lugar a la forma general en que se forman las especies de Entamoeba. Este parásito tiene un núcleo grande con una membrana gruesa que rodea el núcleo.
Hay muchas cromatinas en el interior del núcleo y una gran cariosoma de forma irregular.
La cromatina se agrupa, y es desigual dispersada dentro del núcleo. El parásito se forma por fisión binaria como la mayoría de las Entamoeba spp.
El quiste maduro es la etapa infecciosa, y se sabe que sobrevive más tiempo que los de E. histolytica.
Los quistes pueden sobrevivir entre tres y cuatro horas fuera del cuerpo del huésped después de la desecación.
Los quistes causan infecciones al consumir alimentos y bebidas contaminados, como las aguas residuales.
A veces, los insectos y roedores son los agentes que trasmiten el parásito para causar infecciones en los alimentos y bebidas.
El enquistamiento ocurre una vez que se ingieren los quistes, y viajan al intestino grueso.
Diagnóstico
Los trofozoítos de E. coli pueden distinguirse por sus pseudópodos anchos y cónico. Generalmente se les confunde con E. histolytica debido a su superposición de tamaño.
Los quistes se distinguen por la presencia de ocho núcleos encontrados en la forma madura.
Para el diagnóstico de E. coli, generalmente se analiza una muestra de heces. Este es el mejor método para verificar si el parásito es E. coli y no E. histolytica.
Esto generalmente implica revisar los quistes para diferenciarlos por su tamaño, su forma y el número de núcleos.
La E. coli tiene quistes en tamaño de 10 a 35 micrómetros, la forma es irregular, ovalada con una apariencia similar a una concha que es más uniforme en comparación con E. histolytica, y tiene hasta ocho núcleos en el quiste en comparación con los cuatro núcleos de E. histolytica.
Cuando el técnico de las pruebas microbiólogicas es inexpertos, los quistes tetranucleados de Entamoeba coli se pueden confundir con los quistes maduros de Entamoeba histolytica.
A menudo, un quiste de Entamoeba coli tetranucleado es más grande que un quiste maduro de Entamoeba histolytica.
La cromatina periférica nuclear y el cariosoma se componen de gránulos irregulares «en este asunto de comparación.
Para hacer un diagnóstico para cualquier especie de Entamoeba, generalmente se crea una montura húmeda, se observan los quistes característicos por el método de concentración de formol-éter teñido con yodo o se detectan los trofozoitos que son característicos en una preparación húmeda o en una preparación teñida permanente.
Además, estas manchas de tricrómico se pueden usar para montar los quistes de cualquier Entamoeba spp.
Se pueden usar otras pruebas para el diagnóstico de Entamoeba spp.
Estas pruebas implican el uso de métodos de laboratorio y algunas de estas pruebas de laboratorio incluyen:
- El uso de microscopía óptica (de trasmisión y de barrido).
- Métodos de cultivo.
- Análisis de isoenzimas.
- Pruebas de detección de anticuerpos.
- Pruebas de detección de antígenos.
- Pruebas inmunocromatográficas.
- Pruebas de diagnóstico basadas en el ADN.
Por lo general, los quistes se fracturan por congelación para asegurar que las muestras sean más fáciles de examinar para comparar Entamoeba spp.
Las pruebas de diagnóstico basadas en el ADN incluyen el uso de extracción de ADN, PCR , microarrays y métodos de tipificación.
En una prueba de diagnóstico basada en el ADN que está cambiando la forma de la Entamoeba spp. El diagnóstico se realiza de forma más rápida y precisa utilizando la prueba del «Ensayo de hibridación de línea inversa».
El objetivo principal de esta prueba es detectar y diferentes Entamoeba spp. en muestras de heces para encontrar el agente causante de la disentería amebiana, E. histolytica.
Esta prueba implica el uso de la secuenciación de genes y la visualización de los genomas diferentes de cada Entamoeba spp. Ayudando así a detectar la mortal E. histolytica.
Patología
Las E. coli son en su mayoría parásitos inofensivos, y no causan daño al huésped. Sin embargo, se han reportado casos de hemorragia interna.
Generalmente en el citoplasma de la Entamoeba coli no se encuentran glóbulos rojos, a excepción de los casos raros de pacientes que presentan hemorragia intestinal, lo que hace que se observen sangre en las heces de estos pacientes.
Estas hemorragias puede conducir a lesiones intestinales.
Otros problemas que causa la E. coli generalmente son el resultado de tener demasiados microorganismos en el intestino grueso, de esta forma grandes poblaciones de E. coli pueden conducir a una dispepsia, hiperacidez, gastritis e indigestión.
Estos son los problemas comunes de la mayoría de los parásitos que habitan en el tracto intestinal.
Tratamiento
Generalmente no hay necesidad de administrar ningún tratamiento a la E. coli, debido a la rareza de este parásito que se vuelve infeccioso.
En una situación excepcional, se encontró que la E. coli era infecciosa, las muestras de heces y la microscopía electrónica revelaron grandes poblaciones de amebas dentro de un grupo de pacientes con diarrea persistente.
Es posible que algunos tipos de tratamientos deban usarse debido a la presencia de grandes poblaciones.
Se ha demostrado que algunos compuestos arsenicales como la carbarsona, tratan la etapa del trofozoíto.
Otros compuestos utilizados para tratar grandes poblaciones de E. coli incluyen el furoato de diloxanida , y esto generalmente se usa en la terapia antiamebica.
