Es una infección de transmisión sexual (ITS), la cual causa lesiones en las regiones anal y genital.
Estas lesiones suelen volver a aparecer, incluso después del tratamiento.
¿Qué causa el granuloma inguinal?
Una clase de bacteria conocida como Klebsiella granulomatosa causa esta infección.
El granuloma inguinal es una infección de transmisión sexual, y se puede contraer por tener relaciones sexuales vaginales o anales con una pareja infectada. En raras ocasiones, puede ser contraída a través del sexo oral.
¿Quién está en riesgo?
Está en riesgo quien tiene contacto sexual con personas de las regiones tropicales y subtropicales donde la enfermedad es más prevalente. Los hombres tienen el doble de probabilidad de contraerla que las mujeres.
Como resultado, los hombres homosexuales tienen una mayor probabilidad de contraer el granuloma inguinal.
Síntomas y etapas del granuloma inguinal
Los signos de la enfermedad tienen un inicio lento, sin embargo, puede tomar hasta 12 semanas para que los síntomas alcancen su pico.
Generalmente, primero experimentan un grano o un bulto en la piel de tamaño pequeño que no es normalmente doloroso, así que usted puede no darse cuenta al principio.
En el 90 por ciento de los casos, la infección inicia en la región genital y en la parte anal o llagas en la boca que se producen sólo en una minoría de casos, si el contacto sexual participa en estas áreas.
La lesión de la piel progresa a través de tres etapas
Primera etapa
En la primera etapa, el pequeño grano comenzará a propagarse y a comerse el tejido circundante. A medida que el tejido empieza a declinar, se vuelve de color rosa o rojo débil, afectando todo el ano y los genitales.
Segunda etapa
En la segunda etapa de la enfermedad, las bacterias empiezan a erosionar la piel.
Una vez que esto ocurre, la persona afectada desarrollará úlceras superficiales que se extienden desde los genitales y el ano hasta los muslos y el abdomen inferior (zona inguinal), dándose cuenta de que los perímetros de las úlceras están revestidos con tejido de granulación.
El mal olor puede también acompañar a las úlceras.
Tercera etapa
Cuando el granuloma inguinal avanza a la tercera fase, las úlceras se transforman en tejido cicatricial.
¿Cómo se diagnostica el granuloma inguinal?
Puede ser difícil de detectarse en las primeras etapas, ya que no se pueden observar las lesiones iniciales.
Si las úlceras no sanan después de un período prolongado de tiempo, su médico puede ordenar una biopsia de piel en las lesiones que se estén presentando.
Cuando usted se somete a una biopsia, el médico extraerá una pequeña área de la úlcera con una cuchilla circular.
Una vez retirada, la muestra será analizada para detectar la presencia de bacterias (Klebsiella granulomatosa). También puede ser posible detectar bacterias mediante un raspado en la parte afectada.
El tratamiento para el granuloma inguinal
Puede ser tratado mediante antibióticos como la Tetraciclina, Eritromicina, Estreptomicina y la Ampicilina.
La mayoría de estos medicamentos son prescritos durante tres semanas y se recomienda un tratamiento temprano para prevenir la aparición de cicatrices permanentes e hinchazón en el área genital, anal e inguinal.
Después de que ha sido tratada, es necesario hacer los exámenes de rutina para asegurarse que la infección no vuelva. En algunos casos, se repite después de que parecía haber sido curada.
El granuloma inguinal fue uno de los pocos casos de infecciones bacterianas que podían controlarse en la era pre-antibiótica.
Los compuestos de antimonio se utilizaron con éxito para infecciones primarias, aunque con una eficacia limitada para las recidivas y reinfecciones de enfermedades.
Terapia antimicrobiana
El primer fármaco antimicrobiano que se mostró eficaz en el tratamiento del granuloma inguinal fue la estreptomicina en 1947.
Hoy en día, una gran cantidad de diferentes regímenes terapéuticos están a nuestra disposición, lo que refleja parcialmente la disponibilidad local de diversas preparaciones de medicamentos.
Las pautas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) avalan la administración inmediata de azitromicina 1 gramo, seguidas de 500 miligramos diarios (sin indicar la duración recomendada de la terapia).
De manera similar, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan 1 gramo de azitromicina por semana durante al menos tres semanas, o hasta que todas las lesiones muestren una curación completa.
Los regímenes alternativos pueden incluir doxiciclina, ciprofloxacina, eritromicina base y trimetoprim-sulfametoxazol por un período mínimo de tres semanas.
Se debe considerar la adición de gentamicina por vía intravenosa o intramuscular (en una dosis de 1 miligramo por kilogramo cada ocho horas) si las lesiones no responden adecuadamente en los primeros días de tratamiento.
En el embarazo, la eritromicina (500 miligramos cuatro veces al día) sigue siendo el fármaco preferido.
Los niños con granuloma inguinal deben recibir un ciclo corto de azitromicina (20 miligramos por kilogramo).
Además, a los niños nacidos de madres con granuloma inguinal no tratado se les debe administrar un tratamiento profiláctico de azitromicina de tres días (20 miligramos por kilogramo) una vez al día.
Educación y consejos
En el pasado, la comprensión y el reconocimiento deficientes de esta entidad clínica hicieron que los pacientes con granuloma inguinal grave fueran rechazados por la sociedad.
Muchas personas afectadas tenían sentimientos profundos de culpa y vergüenza, algunos de ellos incluso recurriendo (o contemplando) el suicidio.
Como los pacientes con grandes ulceraciones y lesiones necesitan ciclos prolongados de medicamentos antimicrobianos, definitivamente hay una necesidad de una explicación cuidadosa y una tranquilidad adecuada.
El personal de salud que trabaja en clínicas ambulatorias para infecciones de transmisión sexual suele ser la mejor opción para un enfoque de apoyo sin juicios.
Naturalmente, existe una necesidad de educación continua de los trabajadores de la salud sobre el granuloma inguinal en áreas endémicas, y también la necesidad de aumentar la conciencia de la comunidad sobre la importancia de la enfermedad de úlcera genital (ya que es un factor de riesgo establecido desde hace mucho tiempo para la transmisión de VIH).
Prevención
Los CDC recomiendan que las personas que han tenido relaciones sexuales con un paciente con granuloma inguinal (dentro de los sesenta días anteriores al inicio de los síntomas del paciente) se examinen adecuadamente y se les ofrezca terapia antimicrobiana.
Sin embargo, aún no se ha establecido el valor de prescribir una terapia empírica sin síntomas aparentes y / o signos clínicos.
La utilidad y justificación de las campañas de tratamiento en masa aún es cuestionable, pero algunos ejemplos muestran la aplicabilidad potencial de tales enfoques.
Por ejemplo, el tratamiento masivo de los casos de granuloma inguinal que se identificaron en las visitas domiciliarias en Papua Nueva Guinea fue fundamental para frenar una epidemia localizada en los años cincuenta.
En conclusión, la erradicación mundial del granuloma inguinal es factible, pero tal esfuerzo requerirá una contribución y un liderazgo sustanciales de la OMS para que la enfermedad se incluya en la agenda de erradicación.
Hasta entonces, se necesitará una vigilancia sostenida, para que el diagnóstico de granuloma inguinal no se pierda ni se olvide.