Se refiere a un sangrado dentro del espacio subaracnoideo, que es la zona entre el cerebro y los tejidos que cubren el cerebro.
El espacio subaracnoideo es el espacio donde circula el líquido cefalorraquídeo del cerebro, y es responsable de proteger su cerebro contra lesiones graves, al servir como un cojín.
Una hemorragia en este espacio puede causar un estado de coma, parálisis e incluso la muerte.
Esta condición puede ocurrir rápidamente, y la clave para la supervivencia es una intervención médica inmediata. Esta condición que amenaza la vida también es rara.
De acuerdo con la Fundación de aneurisma cerebral, la hemorragia subaracnoidea representa entre el 0,01 y el 0,08 por ciento de las visitas a la sala de emergencias.
Síntomas de la hemorragia subaracnoidea
Cuando la hemorragia se desarrolla, tiene varios síntomas. El síntoma principal es un dolor de cabeza repentino, severo, que es más intenso en la base del cráneo.
Algunas personas incluso pueden sentir una sensación de explosión en su cabeza antes de que comience la hemorragia.
También puede presentar:
- Dolor de cuello.
- Entumecimiento en todo el cuerpo.
- Dolor de hombro.
- Convulsiones.
- Confusión.
- Irritabilidad.
- Sensibilidad a la luz.
- Disminución de la visión.
- Náusea y vómitos.
- Rápida pérdida de la lucidez mental.
¿Qué causa una hemorragia subaracnoidea?
Está a menudo relacionada con aneurismas cerebrales, que son anomalías dentro de las arterias del cerebro. La causa más común de hemorragia subaracnoidea primaria es un aneurisma sacular congénito.
Se llama un aneurisma sacular, ya que forma un conjunto de bolsas en forma de saco en un vaso cerebral que se parece a un racimo de bayas.
Estos aneurismas se hinchan y debilitan las paredes de las arterias con el tiempo.
Cuando un aneurisma estalla, rápidamente se sangra y forma un coágulo. Esta condición es responsable de la mayoría de los casos de hemorragias cerebrales.
La hemorragia por aneurisma puede ocurrir a cualquier edad, pero es más común a partir de los 40 a 65 años. En algunos casos, un trauma en el cerebro durante una lesión puede causar aneurismas y dar lugar a una hemorragia subaracnoidea.
Factores de riesgo para la hemorragia subaracnoidea
La hemorragia subaracnoidea puede ocurrir a cualquier edad, y algunas personas incluso nacen con aneurismas cerebrales que pueden llevar a esta condición.
Según el Internet Stroke Center, las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de desarrollar aneurismas cerebrales y, por lo tanto, hemorragia subaracnoidea. Fumar y la presión arterial alta también pueden aumentar su riesgo de desarrollar un aneurisma.
El uso de drogas, en particular la metanfetamina y la cocaína, aumenta dramáticamente el riesgo de no solo desarrollar un aneurisma, sino también tener una hemorragia subaracnoidea.
Se estima que una de cada 50 personas tiene un aneurisma no roto en los Estados Unidos. Debe hablar con su médico sobre su riesgo si tiene antecedentes de aneurismas cerebrales.
Si tiene aneurismas, es importante consultar a su médico regularmente para determinar su riesgo de hemorragia, antes de que se desarrolle la hemorragia subaracnoidea.
Diagnóstico de la hemorragia subaracnoidea
La hemorragia subaracnoidea a menudo se detecta durante un examen físico. Es posible que su médico note que tiene problemas de rigidez en el cuello y la visión. La historia del repentino peor dolor de cabeza de su vida también hace más probable la hemorragia subaracnoidea.
Esta combinación a menudo conduce a un diagnóstico de hemorragia subaracnoidea. Necesitará más pruebas para averiguar la gravedad de la hemorragia para que pueda recibir el tratamiento adecuado.
Primero, su médico puede realizar una tomografía computarizada de la cabeza para detectar sangrado en el cráneo. Si los resultados no son concluyentes, el médico puede usar un medio de contraste durante el procedimiento.
Otras pruebas incluyen:
- Un escáner de IRM que usa ondas de radio para obtener imágenes claras y detalladas del cerebro.
- Una angiografía cerebral, que utiliza rayos X y un tinte inyectado para detectar el flujo de sangre en el cerebro.
- Un ultrasonido transcraneal, que detecta el flujo de sangre en las arterias dentro del cerebro.
- Punción lumbar para ver si se encuentran células sanguíneas en el líquido cefalorraquídeo.
Esta condición a menudo se diagnostica erróneamente porque el 73 por ciento de las personas no recibe exámenes.
Tratamiento de la hemorragia subaracnoidea
El tratamiento rápido es importante para salvar su vida y reducir la posibilidad y el alcance del daño cerebral. El sangrado y la presión pueden acumularse en el cerebro, lo que lleva a coma y daño cerebral adicional.
Esta presión debe aliviarse con medicamentos o un procedimiento para drenar algo del líquido cefalorraquídeo. En segundo lugar, la causa del sangrado debe identificarse y tratarse, ya que con frecuencia puede ocurrir un nuevo sangrado del mismo aneurisma sin tratamiento.
La cirugía se realiza para cortar, o cerrar, el aneurisma y detener el sangrado futuro.
Si se corta el aneurisma, se realiza una craneotomía y se cierra el aneurisma. Una craneotomía consiste en abrir el cráneo para exponer el área afectada. También se puede usar una técnica llamada endovascular para reducir el riesgo de sangrado adicional.
Si la hemorragia subaracnoidea causa un coma, el tratamiento incluirá un soporte de vida apropiado con ventilación artificial, protección de las vías respiratorias y la colocación de un tubo de drenaje en el cerebro para aliviar la presión.
Si no pierde el conocimiento debido a la hemorragia subaracnoidea, seguirá recibiendo instrucciones estrictas para prevenir el coma después del tratamiento. El reposo en cama es estándar para las personas que se recuperan de esta condición.
Su médico también le pedirá que se abstenga de forzar su cuerpo o agacharse. Estas acciones pueden aumentar la presión sobre su cerebro.
- Su médico puede prescribir medicamentos para:
- Regular la presión arterial con medicamentos por vía intravenosa.
- Prevenir espasmos arteriales con nimodipina.
- Aliviar dolores de cabeza severos con analgésicos y medicamentos contra la ansiedad.
¿Cómo puedo prevenirla?
La única manera de prevenir esta enfermedad es identificar problemas potenciales dentro del cerebro.
La detección temprana y, en algunos casos, el tratamiento de un aneurisma cerebral puede prevenir una hemorragia posterior en el espacio subaracnoideo.
¿Cuál es la perspectiva a largo plazo para quienes sobreviven a una hemorragia cerebral?
Es una condición grave que puede ser fatal. El período de recuperación es largo, y la persona puede estar en un riesgo mayor de complicaciones si tienes edad avanzada o tienes mala salud en general.
El tratamiento no es una garantía. Algunas personas mueren incluso después de las intervenciones médicas más agresivas. Mientras se acuda a la atención médica lo antes posible, mayores serán las posibilidades de supervivencia.
