Esta inflamación del cuello uterino puede ser aguda o crónica.
El cuello uterino es la parte inferior del útero que conduce a la vagina. Aquí es donde la sangre menstrual sale del útero. Durante el parto, el cuello del útero se dilata para permitir que el bebé pase por el canal endocervical.
Al igual que cualquier tejido del cuerpo, el cuello del útero puede inflamarse, por diversas razones.
La inflamación del cuello del útero se llama la cervicitis. De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, más de la mitad de las mujeres se ven afectadas por esta enfermedad en algún momento de su vida adulta (PubMed de la Salud, 2012).
La causa más común de la inflamación es una infección. Las infecciones que causan la cervicitis pueden ser causadas por la actividad sexual, pero no siempre.
La enfermedad generalmente se clasifica como aguda o crónica. La cervicitis aguda implica el inicio repentino de los síntomas. La cervicitis crónica dura varios meses.
Causas de la cervicitis
La cervicitis aguda es generalmente causada por una infección de transmisión sexual, tales como:
- Herpes genital.
- Clamidia.
- Tricomoniasis.
- El virus del papiloma humano (VPH).
- Gonorrea.
También puede ser causada por una infección debida a otros factores, como la alergia a los espermicidas o condones de látex, un diafragma o una sensibilidad a los productos químicos que se encuentra en los tampones, las bacterias vaginales normales también pueden causar cervicitis.
La inflamación crónica del útero es común después del parto. También puede ocurrir durante el embarazo debido al aumento en los niveles de hormonas que causan el mayor flujo sanguíneo en el cuello del útero.
Síntomas de la cervicitis
Algunas mujeres no muestran síntomas, pero cuando los síntomas están presentes, pueden incluir:
- Sangrado vaginal anormal.
- Flujo vaginal blanco o gris persistente.
- Dolor vaginal.
- Dolor durante el coito.
- Sensación de presión en la pelvis.
- Dolor de espalda.
Si la cervicitis progresa, el cuello del útero puede llegar a inflamarse demasiado. En algunos casos, se pueden formar heridas abiertas. El flujo vaginal con aparición de pus es un síntoma de la cervicitis crónica.
Diagnóstico de la cervicitis
Si usted tiene síntomas de la cervicitis o inflamación del útero, consulte a su médico para que pueda establecer un diagnóstico preciso. Los síntomas de la cervicitis también pueden ser señales de otras patologías vaginales.
A veces, la cervicitis es descubierta durante un examen de rutina si no tiene síntomas. Puede ser diagnosticada de muchas maneras.
Examen pélvico
Para este examen, el médico introduce un dedo enguantado en la vagina, mientras que hace presión sobre el abdomen. De esta manera, se puede detectar anormalidades de los órganos pélvicos, incluyendo el cuello del útero.
Citología vaginal
Durante este examen, el médico toma una muestra de células de la vagina y el cuello uterino. Las células se estudian para notar anomalías.
Flujo vaginal para el examen microscópico
El médico también puede decidir tomar una muestra del flujo del cuello del útero. La muestra luego se coloca bajo un microscopio.
Este examen puede determinar si usted tiene una infección por levaduras (candidiasis), vaginosis bacteriana o tricomoniasis, entre otras patologías.
Las pruebas para las infecciones de transmisión sexual (ETS) también pueden ser practicadas. Si una infección en particular contribuye a la Inflamación del Útero, se debe tratar inmediatamente la infección.
Esto debe curar la inflamación cervical en el útero.
Tratamiento de la cervicitis
Es posible que no necesite tratamiento para la cervicitis si la causa no es una infección de transmisión sexual.
Si se sospecha una infección, el objetivo principal del tratamiento es eliminarla y evitar que se propague al útero y las trompas de Falopio, o si está embarazada, a su bebé.
Según el organismo que esté causando la infección, su médico puede recetarle:
- Antibióticos.
- Medicamentos anti-fúngicos.
- Medicamentos antivirales.
Su médico también puede recomendar que su pareja reciba tratamiento para asegurarse de que no se vuelva a infectar.
No debe tener relaciones sexuales hasta que usted y su pareja hayan terminado el tratamiento.
El tratamiento es especialmente importante si usted es VIH positivo. Esto se debe a que la cervicitis aumenta la cantidad de virus que se elimina del cuello uterino.
Esto puede aumentar sus posibilidades de infectar a un compañero. Además, tener cervicitis puede hacer que sea más fácil contraer el VIH de una pareja VIH positiva.
Si sus síntomas persisten a pesar del tratamiento, su médico debe reevaluarlo.
Los tratamientos no farmacológicos como las duchas o la terapia a base de yogur no funcionan para la cervicitis y pueden empeorar los síntomas. No son recomendables.
Si la cervicitis se debe a la irritación de un cuerpo extraño (un tampón o un pesario retenido) o al uso de ciertos productos (un capuchón cervical o una esponja anticonceptiva), el tratamiento implicaría suspender el uso por un corto tiempo para permitir la cicatrización.
Si tiene inflamación cervical debido a un cáncer cervical o precáncer, su médico puede realizar una criocirugía, congelando las células anormales en el cuello uterino, lo que las destruye. El nitrato de plata también puede destruir las células anormales.
Su médico puede tratar su cervicitis después de que conozcan su causa. Sin tratamiento, la cervicitis puede durar años, causando relaciones sexuales dolorosas y empeorando los síntomas.
Los remedios caseros que apoyan la salud vaginal y cervical y pueden prevenir la cervicitis incluyen:
- Beber té verde: un estudio de 2014 sugirió que el té verde puede tener un papel protector en la reducción del riesgo de cáncer de ovario y endometrio.
- Evitar los irritantes: evitar las duchas, los tampones, los diafragmas y los jabones perfumados reduce el riesgo de irritación.
- Usar ropa interior suelta de algodón: la ropa interiortranspirable reduce la acumulación de humedad y bacterias que pueden provocar una infección.
- Usar condones durante las relaciones sexuales: esto reduce el riesgo de ETS, una de las causas principales de cervicitis.
Complicaciones
Si no se trata, la cervicitis puede llevar a complicaciones. Estas pueden incluir:
- Enfermedad inflamatoria pélvica.
- Esterilidad.
- Embarazo ectópico, donde un óvulo fertilizado se implanta fuera del útero.
- Dolor pélvico crónico.
Panorama
La cervicitis es típicamente tratable. Los tratamientos domiciliarios y las estrategias de prevención deben utilizarse junto con, no en lugar de, el tratamiento médico.
La cervicitis aguda causada por infecciones se trata mejor médicamente para evitar complicaciones.
Si alguien piensa que puede tener cervicitis, debe hablar con su médico.
Prevención de la cervicitis
Hay maneras de reducir su riesgo de desarrollar cervicitis. La abstinencia de relaciones sexuales le protegerá contra la cervicitis causada por infecciones de transmisión sexual.
Reduzca el riesgo de infecciones de transmisión sexual mediante el uso de un condón cada vez que tenga relaciones sexuales.
Evite soluciones químicas tales como soluciones para el lavado vaginal y tampones perfumados puede reducir el riesgo de reacciones alérgicas.
Si utiliza un tampón o diafragma, siga las instrucciones para saber cuándo retirar el tampón y la forma de limpiar el diafragma.
