Son articulaciones especializadas ubicadas entre los huesos del cráneo.
Las suturas permiten el movimiento de los huesos individuales del cráneo entre sí.
Estas articulaciones están constituidas por un tejido fibroso fuerte, que mantienen unidos los huesos del cráneo de un bebé hasta que los huesos se fusionan, normalmente esto ocurre alrededor de los 2 años.
Hasta el momento de la fusión, las suturas se entrecruzan en las fontanelas, que son los puntos blandos de la cabeza del bebé.
La más grande de las cuatro fontanelas está en la parte frontal del cráneo (anterior). La fontanela anterior es el punto suave que siente justo detrás de la frente de su bebé. El siguiente más grande está en la parte posterior. Cada lado del cráneo tiene una pequeña fontanela.
El espacio entre los huesos está lleno de ligamentos muy especializados llamados Fibras de Sharpey. Estas fibras permiten que las articulaciones se muevan y «floten» sin separarse completamente, permitiéndole cierta elasticidad al cráneo.
Los huesos del cráneo y la base del cráneo se osifican por separado y gradualmente se unen en las suturas del cráneo.
Huesos del cráneo
El cráneo está formado por los siguientes huesos, dos de los cuales están emparejados.
- Hueso frontal.
- Huesos parietales (emparejados).
- Hueso occipital.
- Huesos temporales (emparejados).
- Hueso esfenoide.
- Hueso etmoidal.
Morfología de las suturas craneales
Las suturas craneales pueden considerarse como un complejo que consta de cuatro componentes principales:
- Los frentes osteogénicos de las placas óseas aproximadas.
- La mesénquima de sutura que abarca los frentes osteogénicos.
- El pericráneo suprayacente o periostio craneal.
- La duramadre subyacente, una membrana fibrosa y resistente que constituye la capa meníngea externa que envuelve al cerebro y forma el revestimiento interno de los huesos craneales y las suturas.
Tipos de suturas
Las suturas craneales incluyen la sutura metópica o interfrontal, la sutura sagital, la sutura coronal, y las suturas lambdoideas. La sutura metópica o sutura frontal, que está presente de forma variable en adultos.
Las suturas craneales grandes son las siguientes:
Sutura coronal
La sutura coronal une el hueso frontal con los huesos parietales.
Sutura sagital
La sutura sagital une los 2 huesos parietales en la línea media.
Sutura lambdoide
La sutura lamboide une los huesos parietales con el hueso occipital.
Sutura escamosa
La sutura escamosa une la porción escamosa del hueso temporal con los huesos parietales.
Sutura metópica
Cuando la sutura metópica está presente, une los 2 huesos frontales.
Las otras pequeñas suturas craneales son:
Sutura esfenoparietal
Esta pequeña sutura separa el hueso parietal del hueso esfenoides.
Sutura esfenoscámesis
Separa la parte escamosa del hueso temporal del hueso esfenoides.
Sutura parietomastoidea
Separa el hueso parietal del área mastoidea del hueso temporal.
Sutura occipitomastoidea
Separa el hueso occipital del proceso mastoideo.
Efectos del cierre prematuro de las suturas
Las suturas craneales son componentes esenciales en el desarrollo del cráneo.
Las suturas no funcionales durante la evolución de la bóveda craneal y la base del cráneo conducen a deformidades en evolución que pueden terminar en una secuela neurológica.
El cierre prematuro puede afectar una sola sutura, pero pueden estar implicadas varias suturas y se pueden desarrollar deformidades graves, incluidas las órbitas y la fosa anterior en el proceso.
A este cierre prematuro se le denomina craneosinostosis.
Aunque el término craneosinostosis fue utilizado por primera vez, refiriéndose al cierre prematuro de una sutura craneal, fue Sommerring quien describió en 1791 la anatomía de la sutura y postuló no solo su papel en el crecimiento normal del cráneo sino también los efectos de cierre.
Durante el siglo XIX, se afirmo que el cierre prematuro de las suturas (craneostenosis) impidió el crecimiento perpendicular a la sutura y fue acompañado por un crecimiento compensatorio en otras.
Desde esta primera identificación de la craneosinostosis como una entidad clínica distinta, se han propuesto varias teorías para explicar tanto la patogenia de la fusión prematura de la sutura como las aberraciones resultantes en el crecimiento calvarial que dan como resultado un cráneo dismórfico.
Los avances recientes en genética clínica han resultado en la identificación de mutaciones genéticas en los principales síndromes craneosinostósicos.
A pesar de estas ideas sobre las perturbaciones rudimentarias que conducen a la craneosinostosis, los procesos por los cuales las mutaciones en estos genes desencadenan la fusión prematura de la sutura siguen siendo en gran parte desconocidos.