Tiroides Alta: ¿Qué es? Causas, Síntomas, Signos y Tratamiento

cual es el tratamiento natural para la tiroides alta

También conocida como hipertiroidismo, es una condición hormonal relativamente común que ocurre cuando hay demasiada hormona tiroidea en el cuerpo.

Los niveles excesivos de hormonas tiroideas pueden acelerar el metabolismo del cuerpo, desencadenando una variedad de síntomas.

La gravedad, la frecuencia y el rango de los síntomas pueden variar de persona a persona.

Causas de una tiroides alta

La glándula tiroides se encuentra en el cuello.

Produce hormonas que se liberan en el torrente sanguíneo para controlar el crecimiento y el metabolismo del cuerpo.

Estas hormonas se llaman tiroxina y triyodotironina.

Afectan procesos como la frecuencia cardíaca y la temperatura corporal, y ayudan a convertir los alimentos en energía para mantener el cuerpo en funcionamiento.

En el hipertiroidismo, la glándula tiroides produce demasiada tiroxina o triyodotironina, lo que acelera el metabolismo del cuerpo.

Existen varias causas subyacentes posibles, la más común es la enfermedad de Graves, en la que el sistema inmunitario del cuerpo se dirige a la glándula tiroides y hace que produzca demasiadas hormonas tiroideas.

Las mujeres tienen 10 veces más probabilidades de tener una glándula tiroides hiperactiva que los hombres.

En la mayoría de los casos, los síntomas comenzarán en algún lugar entre las edades de 20 y 40 años, aunque pueden comenzar a cualquier edad, incluso en la infancia.

Una glándula tiroides alta ocurre con mayor frecuencia en personas blancas y asiáticas, y con menor frecuencia en personas afro-caribeñas.

Síntomas

Una tiroides hiperactiva (hipertiroidismo) tiene muchos signos y síntomas, aunque es poco probable que los desarrolles a todos.

Cuando se tiene hipertiroidismo, se pueden experimentar algunos de los siguientes síntomas:

  • Hiperactividad.
  • Cambios de humor, como ansiedad, irritabilidad y nerviosismo.
  • Dificultad para dormir (insomnio).
  • Cansancio (fatiga).
  • Debilidad muscular.
  • Necesidad de evacuar heces y orinar con mayor frecuencia.
  • Presencia de exceso de grasas en las heces (esteatorrea).
  • Sensibilidad al calor y exceso de sudoración.
  • Pérdida de peso inexplicada o inesperada, a pesar de tener un aumento en el apetito (aunque en un pequeño número de casos, el aumento del apetito puede conducir a un aumento de peso).
  • Períodos menstruales muy infrecuentes o ligeros, o períodos que paran por completo.
  • Esterilidad.
  • Pérdida de interés en el sexo.

Cuando se padece de diabetes, los síntomas diabéticos, como sed extrema y cansancio, pueden empeorar con el hipertiroidismo.

Signos de tiroides alta

Cuando se tiene tiroides alta, se presentan algunos de los siguientes signos físicos:

  • Hinchazón en el cuello causada por una glándula tiroides agrandada (bocio).
  • Ritmo cardíaco irregular o inusualmente rápido (palpitaciones).
  • Temblores.
  • Piel cálida y húmeda.
  • Enrojecimiento en las palmas de las manos.
  • Aflojamiento de las uñas de sus lechos ungueales.
  • Urticaria.
  • Pérdida de cabello irregular (alopecia).
  • Contracciones en la cara y extremidades.
  • Se debe consultar al médico si se experimentan alguno de los síntomas anteriores.

Tratamiento

Una tiroides alta generalmente responde bien al tratamiento, y la mayoría de las personas puede controlar sus síntomas.

Al determinar en un diagnóstico la causa subyacente de la tiroides alta, la edad del paciente, el tamaño de la glándula tiroides y la presencia de enfermedades médicas coexistentes, el médico puede recomendar el tratamiento apropiado.

Existen medicamentos disponibles para tratar de inmediato los síntomas causados por el exceso de hormonas tiroideas, como una frecuencia cardíaca rápida.

Una de las principales clases de medicamentos utilizados para tratar estos síntomas son los betabloqueantes, por ejemplo, propranolol (Inderal), atenolol (Tenormin), metoprolol (Lopressor).

Estos medicamentos no alteran los niveles de hormonas tiroideas en la sangre, solo contrarrestan el efecto de la hormona tiroidea para incrementar el metabolismo.

Las tionamidas son un grupo de medicamentos, que incluyen carbimazol y metimazol, que detienen la producción excesiva de hormona tiroidea en la glándula tiroides.

Hay dos medicamentos antitiroideos principales disponibles para tratar el hipertiroidismo, como el metimazol (Tapazol) y propiltiouracilo.

El riesgo que se presenta con el uso de estos medicamentos es la supresión eventual de la producción por la médula ósea de los glóbulos blancos (agranulocitosis), los cuales son necesarios para combatir las infecciones.

Es imposible determinar si ocurrirá o no este efecto secundario, por lo que la supresión de la producción regular de glóbulos blancos en la sangre no es útil.

En raras ocasiones, el metimazol o el propiltiouracilo pueden causar fiebre, dolor de garganta u otros signos de infección.

Si se desarrollan estos síntomas, se debe contactar al médico de inmediato.

Por lo general, la terapia antitiroidea a largo plazo solo se usa en personas con la enfermedad de Graves, ya que esta enfermedad puede entrar en remisión bajo tratamiento sin requerir tratamiento con radiación tiroidea o cirugía.

Los estudios también han demostrado que agregar una píldora de hormona tiroidea a la medicación antitiroidea da como resultado tasas de remisión más altas. Pero, actualmente sigue siendo muy controvertida este tipo de terapia.

Si un paciente sufre una recaída, se puede reiniciar el tratamiento con medicamentos antitiroideos, o se puede considerar el uso de yodo radiactivo o cirugía.

Este tratamiento con yodo radiactivo, se administra por vía oral (ya sea en pastillas o líquido) por una sola vez para extirpar una glándula hiperactiva.

El yodo ayuda a reducir la glándula tiroides, reduciendo su actividad, la radiación contenida en el yodo es una dosis muy baja y no representa una amenaza para la salud.

El yodo administrado para el tratamiento ablativo es diferente del yodo utilizado en un examen.

El yodo radiactivo se administra después de un análisis de yodo de rutina, y se determina la absorción del yodo para confirmar el hipertiroidismo.

La glándula tiroides necesita entre 8 y 12 semanas para volverse normal después de la terapia.

El hipotiroidismo permanente es una de las principales complicaciones de esta forma de tratamiento.

Si bien puede observarse un estado hipotiroideo temporal hasta seis meses después del tratamiento con yodo radiactivo, si persiste por más de seis meses, generalmente se inicia la terapia de reemplazo tiroideo.

En un pequeño número de casos, se puede requerir cirugía para extirpar parte o la totalidad de la glándula tiroides, particularmente si hay un gran bocio.

Con la introducción de la terapia con yodo radiactivo y los medicamentos antitiroideos, la cirugía para el hipertiroidismo (tiroidectomía) es menos común.

Los betabloqueantes también se pueden usar a veces para aliviar temporalmente muchos síntomas de una glándula tiroides hiperactiva, aunque no se dirige a la glándula tiroides.

Es común que el tratamiento genere que la tiroides no produzca suficientes hormonas. Esto se conoce como tener una glándula tiroides poco activa (hipotiroidismo).

Sin embargo, una tiroides hipoactiva no suele ser grave y se trata fácilmente.