Pertenece a un grupo de medicamentos conocidos como antiandrógenos no esteroideos.
Los antiandrógenos no esteroideos como la bicalutamida bloquean el efecto de la hormona masculina testosterona en el cuerpo.
La bicalutamida se usa en combinación con otro tratamiento que reduce la cantidad de testosterona en el cuerpo (ya sea con medicamentos llamados análogos de la hormona liberadora de hormona luteinizante (HLHL) o con cirugía para extirpar los testículos) para tratar el cáncer de próstata en etapa tardía (metastásico).
Es posible que su médico haya sugerido este medicamento para afecciones distintas. Si no ha discutido esto con su médico o no está seguro de por qué está tomando este medicamento, hable con su médico. No deje de tomar este medicamento sin consultar a su médico.
No le dé este medicamento a nadie más, incluso si tienen los mismos síntomas que usted. Puede ser perjudicial para las personas tomar este medicamento si su médico no lo ha recetado.
¿Cómo debo usar este medicamento?
La dosis recomendada para bicalutamida es una tableta de 50 mg tomada una vez al día aproximadamente a la misma hora cada día.
La bicalutamida puede tomarse con o sin alimentos. Este tratamiento debe iniciarse al mismo tiempo que el tratamiento con un análogo de HLHL (p. Ej., Goserelina) o después de la extirpación quirúrgica de los testículos.
Muchas cosas pueden afectar la dosis de medicamento que una persona necesita, como el peso corporal, otras afecciones médicas y otros medicamentos. Si su médico le ha recomendado una dosis diferente a las que se detallan aquí, no cambie la manera en que está tomando el medicamento sin consultar a su médico.
Si olvida una dosis, tómela lo antes posible y continúe con su horario habitual. Si es casi la hora de su próxima dosis, omita la dosis omitida y continúe con su horario regular de dosificación. No tome una dosis doble para compensar la que olvidó. Si no está seguro de qué hacer después de omitir una dosis, comuníquese con su médico o farmacéutico.
Guarde este medicamento a temperatura ambiente, protéjalo de la luz y la humedad y manténgalo fuera del alcance de los niños.
No deseche medicamentos en aguas residuales (por ejemplo, en el fregadero o en el inodoro) ni en la basura doméstica. Pregúntele a su farmacéutico cómo deshacerse de los medicamentos que ya no son necesarios o que ya no están vigentes.
Contraindicaciones
No tome si:
- Es alérgico a la bicalutamida o cualquier ingrediente de la medicación.
- Tiene cáncer de próstata en etapa temprana (localizado).
- Este medicamento no está destinado a ser utilizado por mujeres o niños.
¿Qué efectos secundarios son posibles con este medicamento?
Muchas medicaciones pueden causar efectos secundarios. Un efecto secundario es una respuesta no deseada a un medicamento cuando se toma en dosis normales. Los efectos secundarios pueden ser leves o severos, temporales o permanentes.
Los efectos secundarios enumerados a continuación no son experimentados por todas las personas que toman este medicamento. Si le preocupan, analice los riesgos y beneficios de este medicamento con su médico.
Los siguientes efectos secundarios han sido reportados por al menos 1% de las personas que toman este medicamento. Muchos de estos efectos secundarios se pueden controlar, y algunos pueden desaparecer por sí solos con el tiempo.
Póngase en contacto con su médico si experimenta estos efectos y si son severos o molestos. Su farmacéutico puede aconsejarle sobre el manejo de los efectos secundarios.
- Estreñimiento.
- Disminución del apetito.
- Mareo.
- Piel seca.
- Sentirse débil.
- Flatulencia.
- Pérdida de cabello o recrecimiento del cabello.
- Sofocos.
- Impotencia o reducción en el deseo sexual.
- Aumento de la sensibilidad de la piel al sol; mayor riesgo de quemaduras solares.
- Indigestión.
- Comezón.
- Náusea.
- Erupción cutánea.
- Hinchazón de los senos con dolor o sensibilidad.
- Cansancio.
- Aumento de peso.
Aunque la mayoría de los efectos secundarios enumerados a continuación no ocurren muy a menudo, podrían provocar problemas graves si no busca atención médica.
Póngase en contacto con su médico lo antes posible si se presentan los siguientes efectos secundarios:
- Dolor abdominal.
- Sangre en la orina.
- Dolor de pecho.
- Picazón severa.
- Signos de anemia (niveles bajos de glóbulos rojos, por ejemplo, mareos, piel pálida, cansancio o debilidad inusual, dificultad para respirar).
- Signos de depresión (por ejemplo, falta de concentración, cambios de peso, cambios en el sueño, disminución del interés en las actividades, pensamientos de suicidio).
- Signos de problemas hepáticos (p. ej., náuseas, vómitos, diarrea, pérdida del apetito, pérdida de peso, coloración amarillenta de la piel o el blanco de los ojos, orina oscura, heces pálidas).
- Síntomas de niveles altos de azúcar en la sangre (p. ej., micción frecuente, aumento de la sed, ingesta excesiva de alimentos, pérdida de peso inexplicable, mala cicatrización de heridas, infecciones, olor a aliento afrutado).
- Síntomas de insuficiencia cardíaca (por ejemplo, cansancio, dificultad para respirar, especialmente cuando se acuesta, hinchazón de los pies o los tobillos).
Deje de tomar el medicamento y busque atención médica inmediata si ocurre cualquiera de los siguientes:
- Dolor o sensibilidad en el estómago.
- Signos de un ataque cardíaco (p. ej., dolor o presión en el pecho, dolor que se extiende a través del hombro y del brazo, náuseas y vómitos, sudoración).
- Síntomas de problemas pulmonares (p. ej., dificultad para respirar, respiración dolorosa, dificultad para respirar repentina, tos, fiebre).
- Síntomas de una reacción alérgica grave (p. ej., urticaria, dificultad para respirar, dificultad para tragar, hinchazón de la cara, labios, lengua o garganta).
- Algunas personas pueden experimentar efectos secundarios distintos a los enumerados. Consulte con su médico si nota algún síntoma que le preocupe mientras toma este medicamento.
¿Hay otras precauciones o advertencias para este medicamento?
Antes de comenzar a usar un medicamento, asegúrese de informar a su médico sobre cualquier afección médica o alergia que pueda tener, cualquier medicamento que esté tomando, si está embarazada o amamantando, y cualquier otra información importante sobre su salud.
Estos factores pueden afectar la forma en que debe usar este medicamento.
Ritmo cardíaco anormal: este medicamento puede causar cambios en el ritmo normal del corazón, llamado prolongación QT. La prolongación del intervalo QT es una afección grave que pone en peligro la vida.
Si tiene riesgo de problemas de ritmo cardíaco, hable con su médico sobre cómo este medicamento puede afectar su condición médica, cómo su afección médica puede afectar la dosificación y la eficacia de este medicamento, y si se necesita algún control especial.
Anemia: la bicalutamida puede causar bajos niveles de glóbulos rojos. Si experimenta síntomas de reducción del recuento de glóbulos rojos (anemia), como dificultad para respirar, sensación de cansancio inusual o piel pálida, comuníquese con su médico lo antes posible.
Su médico realizará análisis de sangre periódicamente para controlar la cantidad de tipos específicos de células sanguíneas, incluidos los glóbulos rojos, en su sangre.
Diabetes: la dosis puede causar un aumento en los niveles de azúcar en la sangre. Las personas con diabetes pueden considerar necesario controlar su nivel de azúcar en la sangre con mayor frecuencia mientras usan este medicamento.
Si tiene diabetes o está en riesgo de desarrollar diabetes, hable con su médico sobre cómo este medicamento puede afectar su condición médica, cómo su afección médica puede afectar la dosificación y la eficacia de este medicamento, y si se necesita algún control especial.
Somnolencia / estado de alerta reducido: este medicamento puede causar somnolencia. No maneje, opere maquinaria ni realice otras tareas peligrosas hasta que haya determinado cómo le afecta este medicamento.
Enfermedad cardíaca: el riesgo de ataque cardíaco o insuficiencia cardíaca aumenta para las personas que toman bicalutamida.
Si tiene factores de riesgo para enfermedad cardíaca (obesidad, colesterol alto, tabaquismo), hable con su médico sobre cómo este medicamento puede afectar su condición médica, cómo su afección médica puede afectar la dosificación y la eficacia de este medicamento, y si existe algún control especial es necesario.
Función hepática: la bicalutamida se descompone en el hígado. La enfermedad hepática o la función hepática reducida pueden causar que este medicamento se acumule en el cuerpo, causando efectos secundarios.
Si tiene problemas de hígado, hable con su médico sobre cómo este medicamento puede afectar su condición médica, cómo su afección médica puede afectar la dosificación y la eficacia de este medicamento, y si se necesita algún control especial.
Es posible que su médico quiera analizar su función hepática regularmente con análisis de sangre mientras toma este medicamento.
Este medicamento también puede causar problemas hepáticos. Comuníquese con su médico de inmediato si experimenta síntomas de problemas hepáticos como fatiga, malestar, pérdida del apetito, náuseas, coloración amarillenta de la piel o el blanco de los ojos, orina oscura, heces pálidas, dolor o hinchazón abdominal y picazón en la piel.
Enfermedad pulmonar: en raras ocasiones, y particularmente cuando se usan dosis más altas, se han reportado casos de enfermedad pulmonar intersticial con este medicamento. Si experimenta cualquier síntoma de problemas pulmonares, como dificultad para respirar, sibilancias, tos, fiebre o dificultad para respirar, comuníquese con su médico de inmediato.
Osteoporosis: se ha demostrado que el uso a largo plazo de bicalutamida reduce la resistencia ósea y puede aumentar el riesgo de fracturas óseas.
Si tiene osteoporosis o tiene un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis, hable con su médico sobre cómo este medicamento puede afectar su condición médica, cómo su condición médica puede afectar la dosificación y la eficacia de este medicamento, y si se necesita algún control especial.
¿Qué otras drogas podrían interactuar con este medicamento?
Puede haber una interacción entre bicalutamida y cualquiera de los siguientes:
- Amiodarona.
- Antipsicóticos (p. ej., clorpromazina, clozapina, haloperidol, olanzepina, quetiapina, risperidona).
- Antifúngicos «azoles» (p. ej., ketoconazol, fluconazol).
- Bloqueantes de los canales de calcio (p. ej., amlodipina, diltiazem, nifedipina, verapamilo).
- Disopiramida.
- Dofetilida.
- Dronedarona.
- Flecainida.
- Lomitapide.
- Antibióticos macrólidos (p. ej., claritromicina, eritromicina).
- Metadona.
- Pimozida.
- Propafenona.
- Quinidina.
- Quinina.
- Antibióticos de quinolona (p. ej., ciprofloxacina, moxifloxacina).
- Salmeterol.
- Antagonistas de la serotonina (medicamentos antieméticos, p. ej., granisetrón, ondansetrón).
- Sotalol.
- Antidepresivos tricíclicos (p. ej., amitriptilina, clomipramina, desipramina, trimipramina).
- Warfarina.
Si está tomando alguno de estos medicamentos, hable con su médico o farmacéutico. Dependiendo de sus circunstancias específicas, su médico puede querer que:
- Deje de tomar uno de los medicamentos.
- Cambiar uno de los medicamentos por otro.
- Cambiar la forma en que está tomando uno o ambos medicamentos.
- Dejar todo como esta.
Una interacción entre dos medicamentos no siempre significa que debe dejar de tomar uno de ellos. Hable con su médico sobre cómo se manejan o deben controlarse las interacciones de medicamentos.