Bocio: Tipos, Causas, Factores De Riesgo, Síntomas, Diagnóstico, Tratamiento, Pronostico y Prevención

nódulos tiroideos

Es un término en latín que se refiere a un problema estructural con la glándula tiroides, específicamente una glándula tiroides agrandada globalmente.

La tiroides agrandada puede tener o no otro tipo de problema estructural de la tiroides llamado nódulos tiroideos.

Los síntomas que pueden sugerir el bocio dependen de la velocidad a la que crece la tiroides y si hay un problema funcional de la tiroides.

Los síntomas de un bocio incluyen síntomas de tipo compresivos (asfixia y dificultad para respirar), agrandamiento del cuello, hipotiroidismo e hipertiroidismo.

Tipos

Los pacientes con bocio también pueden tener problemas funcionales de tiroides, por lo que hay dos tipos de bocio: el bocio no tóxico y el bocio multinodular tóxico.

  1. El bocio simple no tóxico: se define como cualquier agrandamiento de la tiroides que se halle asociado con hipertiroidismo o con el hipotiroidismo.
  2. El bocio multinodular tóxico: se refiere a las glándulas tiroides agrandadas que se asocian con hipertiroidismo. La enfermedad de Graves es un subconjunto.

Causas

Se ha pensado tradicionalmente que el bocio es una respuesta adaptativa de la tiroides a cualquier factor que afecte la síntesis de la hormona tiroidea.

Este concepto clásico de bocio no explica todos los aspectos de todos los tipos de bocios.

Hace años, se pensaba que la deficiencia de yodo era la principal causa del bocio, ya que el yodo es el componente principal de la hormona tiroidea. Pero hay un papel de factores genéticos en la formación de bocios.

Esto es sugerido por la presencia de varios pacientes con bocio dentro de una misma familia, la mayor tasa de concordancia de bocios en gemelos monocigóticos que en gemelos dicigóticos.

La relación de mujer a hombre de 1: 1 en áreas deficientes de yodo 9:1 en bocios esporádicos y la presencia de bocios en aquellas áreas donde el yodo ya no es deficiente.

Los endocrinólogos actualmente creen que el bocio debe ser considerado como un rasgo genético complejo, el cual se ve afectado por ciertos factores ambientales.

Aunque la deficiencia de yodo es la causa ambiental más común, otros factores como el tabaquismo, las infecciones, los medicamentos y los bociógenos también pueden afectar.

La glándula tiroides está ubicada en la parte delantera del cuello, donde se juntan las clavículas y es la glándula encargada de producir las hormonas que controlan la energía del cuerpo, el metabolismo.

La deficiencia de yodo es la causa más común de bocio, ya que el organismo necesita yodo para producir la hormona tiroidea.

La tiroides se agranda para captar la mayor cantidad posible de yodo y estar en la capacidad de producir la cantidad de la hormona tiroidea.

Entonces, un bocio puede ser un signo de que la tiroides no puede producir suficiente hormona tiroidea. Las causas comunes de los bocios incluyen:

Deficiencia de yodo

El mineral de yodo es necesario en la producción de hormonas tiroideas.Pero este problema se puede solucionar con el simple uso de la sal yodada mineral en la preparación diaria de los alimentos.

La enfermedad de Graves

La enfermedad de Graves es una condición en la cual el sistema inmune ataca por error a la glándula de la tiroides, de esta manera, causa una producción excesiva de hormonas en el organismo.

Esto puede causar que la glándula tiroides se hinche.

Tiroiditis de Hashimoto

Es una enfermedad autoinmune que ocasiona daños en la tiroides, provocando de esta manera que se reduzca la producción de las hormonas.

Esto también puede provocar el bocio.

El cáncer de tiroides

El cáncer que se presenta en la glándula tiroides puede aumentar el tamaño de este órgano en el cuerpo.

El embarazo

Durante el embarazo, las mujeres producen hormonas que pueden hacer que la glándula tiroides aumente de tamaño.

Tiroiditis

La tiroiditis es una condición que causa inflamación de la glándula tiroides.

Otras causas de bocio incluyen:

  • El sistema inmune del cuerpo ataca la glándula tiroides (problema autoinmune).
  • Ciertos medicamentos como el litio, la amiodarona.
  • La presencia de infecciones.
  • El habito de fumar cigarrillos.
  • Ciertos alimentos como la soja, el maní, los vegetales como el brócoli y el repollo.
  • Bocio nodular tóxico, una glándula tiroides agrandada que tiene un crecimiento pequeño y redondeado o muchos crecimientos llamados nódulos, que producen demasiada hormona tiroidea.

Factores de riesgo

Existe un mayor riesgo de desarrollar un bocio si:

  • Si el paciente es de sexo femenino.
  • Si se tiene un historial familiar de enfermedades autoinmunes.
  • Tener más de 40 años de edad.
  • Si alguna vez recibió radioterapia en el área del cuello o del pecho.
  • Estar embarazada o atravesando por el periodo de la menopausia.
  • Tomar ciertos medicamentos, incluyendo los inmunosupresores, los antirretrovirales, los medicamentos para el corazón como cordarone o pacerone (amiodarona), o medicamentos de uso psiquiátrico como Lithobid (litio).

Síntomas

Los principales síntomas son el agrandamiento de la glándula tiroides agrandada.

Pocas veces, una tiroides que ha sido agrandada es capaz de ejercer cierta presión sobre la tráquea y el tubo de alimentos (esófago). Esto puede ocasionar:

  • Las dificultades respiratorias (cuando los bocios son muy grandes), especialmente cuando se extienden hacia la espalda.
  • La tos.
  • La ronquera.
  • Dificultades para tragar, especialmente los alimentos sólidos.
  • El dolor en el área de la tiroides.
  • La hinchazón en la base del cuello.
  • Una sensación de aprensión en la garganta.
  • Los mareos cuando los brazos se levantan por encima de la cabeza.
  • Hinchazón de la vena del cuello.

También es probable que los bocios no lleguen a causar ningún síntoma.

Diagnóstico

Para diagnosticar un bocio, el médico realiza un examen físico, inicia palpando el cuello y hace que el paciente trague.

Otras formas de diagnosticar un bocio incluyen:

  1. Prueba de hormonas: se realiza la medición de ciertos niveles de hormonas en un análisis de sangre para que se pueda revelar si la glándula tiroides está funcionando correctamente.
  2. Prueba de anticuerpos: durante este análisis de sangre se mide los anticuerpos anormales que se producen si usted tiene una predisposición a la enfermedad tiroidea autoinmune.
  3. Ultrasonido: en esta prueba de imágenes se le permite revisar el tamaño de la glándula tiroides del paciente y de esta forma determinar si esta contiene algún nódulo (que puede modificar los niveles de hormonas que produce).
  4. Tomografía tiroidea: esta prueba de imágenes proporciona información sobre el tamaño y la función de su glándula tiroides.
  5. Tomografía computarizada y resonancia magnética: estas pruebas de imágenes se pueden usar para verificar el tamaño del bocio o si se ha diseminado al interior del pecho.
  6. Biopsia: durante este procedimiento, el cual consiste en insertar una aguja en la glándula tiroides para obtener una muestra de tejido o líquido, que luego se examina con un microscopio para los diagnósticos deferenciales del cáncer de tiroides.

Tratamiento

En muchos casos, los bocios están asociados con enfermedades funcionales como hipotiroidismo e hipertiroidismo.

Los nódulos tiroideos pueden necesitar evaluación por aspiración con aguja fina.

Un bocio solo necesita tratamiento si está causando síntomas.

El tratamiento aplicado para el caso de las tiroides agrandadas incluye alguna de las siguientes:

  • Pastillas de reemplazo de hormona tiroidea si el bocio se debe a una tiroides hipoactiva. Si tiene hipotiroidismo (tiroides poco activa), es posible que el médico prescriba Levothroid o Synthroid (levotiroxina) para reemplazar las hormonas que le faltan.
  • Las dosis pequeñas de yodo de Lugol o la mejor conocida como solución de yodo de potasio, en el caso de que se el agrandamiento de la glándula  puede tratarse a la falta de yodo.
  • Yodo radioactivo: este es un tratamiento que se administra por vía oral, para reducir la glándula, especialmente si la tiroides produce demasiada hormona tiroidea y puede reducir el tamaño de su bocio.
  • Cirugía (tiroidectomía): el médico puede recomendar una tiroidectomía, este es un procedimiento quirúrgico para extirpar la totalidad o parte de su glándula tiroides.
  • Medicamentos: el médico puede indicar el uso de aspirina o puede recetar un corticosteroide si el paciente tiene una inflamación de la glándula tiroides, así como ciertos medicamentos que logran inhibir el crecimiento de la glándula tiroides.

Pronóstico

Un bocio simple puede desaparecer por sí solo (Ocurre con mayor frecuencia en los pacientes) o por el contrario, puede volverse más grande. Con el tiempo, la glándula tiroides puede dejar de producir suficiente hormona tiroidea, provocando el hipotiroidismo.

En algunos casos, el bocio se vuelve tóxico y puede causar altos niveles de hormona tiroidea, una condición llamada hipertiroidismo.

Prevención

Para prevenir el agrandamiento de la glándula tiroides, se recomienda el uso de sal yodada de mesa en la dieta funcionando como un factor importante en la prevención del bocio simple.