Hemorragia Intracraneal: Causas, Síntomas, Diagnóstico, Tratamiento, Complicaciones y Perspectivas

parénquima cerebral

Hablamos de la acumulación patológica de la sangre dentro de la bóveda craneal.

Puede ocurrir dentro del parénquima cerebral o los espacios circundantes meníngeos, es responsable del 8 al 13% de todos los trazos y los resultados de un amplio espectro de trastornos.

Todas las hemorragias intracraneales (HIC) comparten algunas características clínicas clásicas. Síntomas comunes que incluyen dolor de cabeza, náuseas, vómitos, confusión, somnolencia o convulsiones.

Los pacientes pueden estar no alerta y moribundos.

En ancianos alcohólicos y pacientes anticoagulados, incluso el menor traumatismo puede ocasionar una devastadora hemorragia intracraneal.

Este trauma puede preceder cualquier tipo de HIC, pero es más comúnmente asociado con los hematomas epidurales y subdurales.

Causas

La hemorragia intracraneal tiene un número de causas, incluyendo:

  • Trauma craneal, como el causado por una caída, accidente de auto, accidente deportivo, etc.
  • Daños de hipertensión (presión arterial alta) a las paredes del vaso sanguíneo que provoca fuga o rotura del vaso sanguíneo.
  • Obstrucción de una arteria en el cerebro por un coágulo de sangre que se forma en el cerebro o viajó al cerebro desde otra parte del cuerpo, con salida posterior de la arteria dañada.
  • Ruptura de aneurisma cerebral (un punto débil en la pared del vaso sanguíneo que abomba y estalla).
  • Acumulación de la proteína amiloide dentro de las paredes de las arterias del cerebro (angiopatía amiloide cerebral).
  • Fugas de malformaciones de las arterias o venas (malformación arteriovenosa).
  • Tratamiento con anticoagulantes (diluyentes de la sangre).
  • Sangrado de tumores.
  • Tabaquismo, consumo excesivo de alcohol o uso de drogas ilegales como la cocaína.
  • Condiciones relacionadas con el embarazo o el parto, como preeclampsia, conducto deferente postparto o hemorragia intraventricular neonatal.

Síntomas de la hemorragia intracraneal

Los signos y síntomas de la HIC varían según el tipo, pero por lo general incluyen:

  • Súbita sensación de hormigueo, debilidad, entumecimiento o parálisis de la cara, brazo o pierna, especialmente en un lado del cuerpo.
  • Dolor de cabeza repentino e intenso.
  • Dificultad para tragar.
  • Perdida de la visión.
  • Pérdida del equilibrio o coordinación.
  • Dificultad en la comprensión, habla, lectura o escritura.
  • Cambio en el nivel de conciencia o alerta, marcada por el estupor, letargo, somnolencia o coma.

¿Cómo se diagnostica la hemorragia intracraneal?

Si tiene algunos síntomas de hemorragia intracraneal, un médico le realizará un examen neurológico.

Las pruebas de imagen determinan si está teniendo un accidente cerebrovascular isquémico (bloqueo) o un accidente cerebrovascular hemorrágico (sangrado).

Las pruebas de diagnóstico para la hemorragia intracraneal pueden incluir una tomografía computarizada. Este tipo de prueba crea imágenes de su cerebro, lo que puede confirmar el sangrado y también evaluar otras pruebas de traumas en la cabeza.

Una resonancia magnética puede ayudar a su médico a ver su cerebro más claramente para identificar mejor la causa del sangrado.

Un angiograma utiliza la tecnología de rayos X para tomar imágenes del flujo sanguíneo dentro de una arteria y puede revelar cualquier anomalía en los vasos sanguíneos, como aneurismas o malformaciones arteriovenosas.

Los análisis de sangre pueden identificar trastornos del sistema inmunológico, inflamación y problemas de coagulación de la sangre que pueden causar sangrado en el cerebro.

Tratamiento

Si ha ocurrido un accidente cerebrovascular, debe determinarse la causa (sangrado o coágulos de sangre) para poder iniciar el tratamiento apropiado.

Un tratamiento médico oportuno puede minimizar el daño al cerebro, mejorando así la posibilidad de recuperación del paciente.

La cirugía es necesaria en las siguientes situaciones:

Si la hemorragia es causada por una arteria rota requiere descompresión inmediata del cerebro para liberar sangre agrupada y reparar daños en los vasos sanguíneos.

La descompresión puede hacerse a través de un procedimiento de agujero de las rebabas, una incisión, craniectomía o una craneotomía (apertura de la cavidad craneal).

La hemorragia causada por un aneurisma cerebral requiere recorte del aneurisma a través de un procedimiento quirúrgico de la craneotomía, en cuanto permita la condición neurológica del paciente.

Otros tratamientos pueden incluir:

  1. Ansiolíticos o medicamentos para controlar la presión arterial.
  2. Los fármacos antiepilépticos para el control de las convulsiones.
  3. Otros medicamentos necesarios para el control de otros síntomas, tales como analgésicos para el severo dolor decabeza y descalcificadores para prevenir el estreñimiento y el esfuerzo durante la defecación.
  4. Nutrientes y líquidos según sea necesario. Estos pueden darse a través de una vena (vía intravenosa) o una alimentación del tubo en el estómago, especialmente si el paciente tiene dificultad para deglutir.

¿Cuáles son las complicaciones de la hemorragia intracraneal?

Dependiendo de la ubicación de la hemorragia y de cuánto tiempo estuvo su cerebro sin oxígeno, las complicaciones pueden incluir:

  • Habilidades del lenguaje deterioradas.
  • Fatiga.
  • Problemas para tragar.
  • Pérdida de la visión.
  • Dificultad con sensaciones o movimientos en un lado del cuerpo.
  • Neumonía.
  • Disfunción cognitiva (pérdida de memoria, dificultad de razonamiento), confusión.
  • Hinchazón en el cerebro.
  • Convulsiones.
  • Depresión, problemas emocionales.
  • Fiebre.

¿Cómo puedo prevenir la hemorragia intracraneal?

Puede disminuir sus posibilidades de hemorragia intracraneal de la siguiente manera:

  • No fumar.
  • Tratamiento de enfermedades del corazón.
  • Tratar la presión arterial alta.
  • Mantener la diabetes bajo control.
  • Mantener un estilo de vida saludable.

¿Cuál es la perspectiva a largo plazo?

La recuperación después de una hemorragia intracraneal difiere mucho de una persona a otra y dependerá de una variedad de factores.

Estos incluyen su edad y estado general de salud, la ubicación de la hemorragia y el alcance del daño.

Algunas personas pueden tardar meses o años en recuperarse. La mayoría de los pacientes con hemorragia intracraneal tienen alguna discapacidad a largo plazo.

En algunos casos, es posible que se necesite atención a domicilio o en un asilo de ancianos.

Los grupos de apoyo de apoplejía pueden ayudar a las personas y familias a sobrellevar el cuidado a largo plazo. Su médico u hospital pueden proporcionarle información sobre los grupos de apoyo que se reúnen en su área.