Es un trastorno en la salud mental caracterizado por un intenso miedo a aumentar de peso, un peso anormalmente bajo y una percepción distorsionada del peso corporal.
La anorexia nerviosa también se conoce simplemente como anorexia.
Las personas que padecen este trastorno intentan controlar la forma de su cuerpo, peso que afecta extremadamente sus vidas.
Para continuar perdiendo peso o para prevenir el aumento de peso, las personas generalmente limitan su consumo de alimentos.
Para controlar las calorías, pueden vomitar después de comer, o hacer un uso incorrecto de laxantes, píldoras para adelgazar, diuréticos y enemas.
Alternativamente, también pueden intentar hacer ejercicio excesivo para perder peso.
Las personas que sufren de anorexia nerviosa son similares, a las personas que sufren de bulimia nerviosa.
La mayoría de las personas que padecen bulimia están por encima del peso normal, mientras que las personas con anorexia nerviosa tienen un peso corporal anormalmente bajo.
En las personas con anorexia nerviosa, aumentar de peso, les provoca un miedo intenso.
La anorexia nerviosa es un trastorno peligroso, cuyas características principales son un peso corporal anormalmente bajo, un miedo a aumentar de peso y una enfoque distorsionado del peso corporal ideal.
Las personas que luchan contra la anorexia harán casi cualquier cosa para evitar aumentar de peso, incluso pasar hambre.
Cuando las personas con anorexia se miran en un espejo, no ven un reflejo exacto. Creen que están gordos, incluso cuando su contextura es de delgadez extrema.
Las personas con anorexia restringen la cantidad y los tipos de alimentos que comen y regulan las calorías muy de cerca. Mantienen un miedo intenso a aumentar de peso y emplearán cualquier cantidad de tácticas para lograr la pérdida de peso.
La anorexia no se trata de comida, y aunque es un trastorno que se centra en los alimentos, pero se trata de mucho más. La anorexia es una forma incorrecta de lidiar con problemas emocionales.
Los investigadores creen que esta forma de manejar los problemas emocionales trata de obtener control sobre el cuerpo. Las personas con anorexia a menudo equiparan su autoestima con la delgadez.
Los médicos diagnostican la anorexia nerviosa en personas de todas las edades y sexos, pero entre el 90 y el 95% de los que la padecen son niñas y mujeres.
La anorexia es más común entre los adolescentes. Es uno de los trastornos psiquiátricos más comunes en las mujeres jóvenes, y uno de los más peligrosos.
La investigación sugiere que hasta 3 de cada 100 adolescentes están luchando contra la anorexia.
Causas de la anorexia nerviosa
Este trastorno es una combinación de factores biológicos, emocionales y sociales.
Hay muchos otros factores que contribuyen y que incluyen: las experiencias traumáticas, una baja autoestima, las dificultades emocionales y el entorno familiar, entre otros.
A continuación se detallan algunas de las razones que causan la anorexia nerviosa:
Razones genéticas
La investigación notifica que una predisposición genética a la anorexia nerviosa se presenta en familias.
Los pacientes con un familiar de primer grado-hermanos, hijos o padres que tienen el trastorno tienen un mayor riesgo de anorexia nerviosa.
Las modificaciones en los genes pueden hacer que las personas se inclinen a desarrollar anorexia.
La química del cerebro también juega un papel vital en la anorexia.
Las personas con anorexia tienden a tener más hormonas cerebrales relacionadas con el estrés, alto nivel de cortisol y un nivel reducido de norepinefrina y serotonina que se asocian con una sensación de bienestar.
Razones intelectuales
Las personas con anorexia nerviosa son a menudo perfeccionistas y tienen mucho espíritu de superación. Están sobresaliendo en todo y siempre complacen a los demás.
Tienen todas estas características exteriores, pero en el interior se sienten inútiles, inadecuados y necesitados.
Presiones de los hogares y la comunidad
Además de la presión cultural, también existe una presión familiar y social que contribuye a este trastorno. Incluye la participación en actividades que conducen a la esbeltez como el modelado, la gimnasia o el ballet.
El control excesivo de los padres también puede poner énfasis en el niño que sufre del trastorno alimentario.
Actividades artísticas, laborales y deportivas, bailarines, actores, atletas y modelos tienen un alto riesgo de anorexia nerviosa.
Los atletas jóvenes, en su mayoría pierden peso debido a las sugerencias hechas por sus padres y entrenadores.
Los medios de comunicación como las revistas de moda y la televisión presentan actores y modelos delgados.
Los medios reflejan que la delgadez puede ganar popularidad y éxito. Finalmente, hay presión ambiental y social.
En la cultura actual dominante, la delgadez es el ideal.
Es fácil para las jóvenes inferir de las películas, las revistas y las redes sociales que la delgadez conduce a la popularidad y al amor.
Los medios están en todas partes, por lo que es imposible evitar los mensajes que envía sobre la belleza.
Los padres pueden ayudar a combatir este factor de riesgo demostrando hábitos de alimentación saludables y enseñando a sus hijos que todos los cuerpos son hermosos.
Alteración del peso
Cuando las personas ganan o pierden peso intencionalmente o deliberadamente, esto podría ser el resultado de comentarios negativos o positivos de las personas que lo rodean.
Estos comentarios provocan que los pacientes comiencen a hacer dieta.
Grandes cambios en el estilo de vida
Un evento de transición, como cambiar de escuela, la llegada de la pubertad, un nuevo trabajo, mudarse, la muerte o la enfermedad de un ser querido, terminar una relación romántica, también puede causar estrés.
Estos cambios pueden aumentar el estrés emocional y provocar anorexia.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo para que las personas desarrollen trastornos alimentarios pueden ser:
- Los que están en mayor riesgo son las mujeres jóvenes en su adolescencia.
- Ciertos temperamentos y tipos de personalidad pueden aumentar el riesgo de desarrollar anorexia.
- Las personas que tienden a ser perfeccionistas, obsesivas y ansiosas corren un mayor riesgo.
- Algunas personas con anorexia creen que necesitan ser perfectas si quieren amor y respeto.
- Otros tienen un miedo intenso a la humillación y al ridículo.
- Los problemas de salud mental, incluida la depresión, el trastorno obsesivo compulsivo y la ansiedad, son comunes en personas con anorexia.
- Para algunas personas, un evento desencadenante puede aumentar el riesgo de desarrollar anorexia.
- Una historia de trauma, como el abuso sexual o la muerte de uno de los padres, aumenta el riesgo de desarrollar un trastorno alimentario.
Otros grupos de alto riesgo son los atletas y aquellos en las artes escénicas, incluidos bailarines, actores y modelos.
La presión de entrenadores y padres puede, incluso cuando no sea intencional, contribuir al problema.
Muchos pacientes con anorexia disfrutan el refuerzo positivo que obtienen cuando pierden peso la primera vez, por lo que continúan restringiendo la comida para obtener más elogios y reconocimiento.
Tipos
La anorexia nerviosa se ha clasificado en dos tipos.
Entre las personas diagnosticadas con anorexia, se presentan aquellos que restringen la ingesta de alimentos y los que comen mucho y se purgan.
En el tipo restrictivo de anorexia, la persona logra la pérdida de peso al restringir las calorías.
En el tipo de purga de la anorexia, la pérdida de peso se logra mediante el uso de diuréticos y laxantes o vómitos.
Signos y síntomas de la anorexia nerviosa
Los síntomas físicos y los signos de la anorexia nerviosa están asociados con la inanición, pero el trastorno también involucra problemas de conducta y emocionales que están asociados con la percepción poco realista del peso del cuerpo.
Los signos y síntomas físicos de la anorexia se relacionan con la inanición, mientras que los signos psicológicos se relacionan con la percepción distorsionada del peso corporal.
Las personas que padecen de anorexia tienen la creencia de que son gordas.
Para perder peso podrían reducir drásticamente su ingesta de alimentos a través de una dieta o ayuno.
A menudo se ejercitan compulsivamente para quemar calorías, lo que puede comenzar a parecer una adicción al ejercicio.
Las personas con anorexia también pueden vomitar para deshacerse de calorías o usar laxantes, diuréticos, suplementos dietéticos o enemas.
La anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa se caracterizan por una imagen corporal distorsionada y comportamientos alimenticios anormales, pero son trastornos diferentes.
Lo que diferencia la anorexia de la bulimia es el peso corporal.
Los médicos proporcionarán un diagnóstico de anorexia si el paciente tiene un bajo índice de masa corporal.
Diagnosticarán la bulimia si el paciente tiene un índice de masa corporal normal o superior al normal.
Los síntomas físicos de la anorexia nerviosa incluyen:
- Pérdida de peso extrema.
- Cabello que se adelgaza, se rompe o se cae.
- Piel seca y amarillenta.
- Uñas quebradizas.
- Ausencia de menstruación.
- Mareos o desmayos.
- Coloración azulada de los dedos.
- Manos y pies fríos o hinchados.
- Estómago hinchado o molesto.
- Vellosidad suave que cubre el cuerpo.
- «Mejillas tipo ardilla» (agrandamiento de la glándula parótida).
- Fatiga.
- Insomnio.
- Intolerancia al frío.
- Estreñimiento.
- Deshidratación.
- Presión arterial baja.
- Ritmos cardíacos anormales.
- Osteoporosis.
- Brazos y piernas hinchadas.
Los signos de anorexia en la salud mental y el comportamiento incluyen:
- Auto percepción distorsionada (creyendo que tienen sobrepeso cuando son delgados).
- Miedo a aumentar de peso.
- Actitud negativa a comer.
- No reconocer lo grave de la enfermedad.
- Negación del hambre.
- Preocupación por la comida.
- Comportamiento obsesivo-compulsivo.
- Depresión.
- Adicción al ejercicio.
- Mentir sobre la cantidad de comida que se ha comido.
- Retiro social.
- Irritabilidad.
- Pensamientos de suicidio.
- Humor infeliz o falta de emoción.
- Interés reducido en el sexo.
- Incapacidad para recordar cosas.
Señales de advertencia de la anorexia
- Saltarse comidas o poner excusas para no comer.
- Constantemente pesándose a sí mismos.
- Comiendo solo algunos tipos de comida.
- Negarse a comer en público.
- Ritualmente se cortan los alimentos en pedazos pequeños pedazos.
- Ejercicio compulsivo.
- Planeando y preparando comidas elaboradas para otros pero sin comerlas.
- Los vómitos compulsivos y auto inducidos y para deshacerse de los alimentos consumidos.
- El uso de productos a base de hierbas, laxantes, suplementos dietéticos y enemas.
- Desconexión social.
Diagnóstico de la anorexia
- Prueba física: puede incluir medir su peso y altura, revisando los signos vitales como la temperatura, la presión arterial, la frecuencia cardíaca, escuchando los pulmones y corazón, revisando las uñas y piel y examen del abdomen.
- Examen de laboratorio: incluye hemograma completo y análisis de sangre detallados para verificar las proteínas y los electrolitos, así como el funcionamiento del hígado, riñón y tiroides.
- Prueba psicológica: una evaluación psicológica acerca de sus sentimientos y pensamientos.
- Pruebas como las radiografías: pueden ayudar a controlar la densidad ósea o detectar problemas cardíacos o neumonía. Los electrocardiogramas se pueden usar para buscar irregularidades en el corazón.
Tratamiento
Como la anorexia nerviosa incluye tanto el cuerpo como la mente, el tratamiento debe realizarse mediante esfuerzos de equipo.
Las personas involucradas en el tratamiento de la anorexia nerviosa son dietistas, médicos, consejeros, psicólogos y médicos.
El apoyo de los miembros de la familia puede marcar una gran diferencia en el éxito del tratamiento.
La recuperación puede ser más fácil con los apoyos familiares.
Medicamentos y hospitalización para tratar la anorexia nerviosa: el primer paso en los tratamientos de anorexia es estabilizar y abordar cualquier problema de salud grave. Si la desnutrición es grave, puede ser necesaria la hospitalización hasta que alcance un peso menos crítico.
Los médicos controlarán los signos vitales, buscarán complicaciones médicas y los estabilizarán médicamente. Si no se encuentra en peligro médico inmediato, puede optar por el tratamiento ambulatorio.
Asesoramiento nutricional para tratar la anorexia nerviosa: la segunda etapa del tratamiento de anorexia es pasar por el asesoramiento nutricional. Puede aprender sobre nutrición adecuada y alimentación saludable del dietista o nutricionista.
También lo ayudarán a seguir los planes de comidas, que implican suficientes calorías para mantener o alcanzar un peso normal y saludable.
Terapia para la anorexia nerviosa: el tratamiento de anorexia necesita un asesoramiento adecuado. La terapia de conversación o psicoterapia hace que el paciente se dé cuenta de los sentimientos y pensamientos que están alimentando el trastorno alimentario y los cambia con los más saludables.
Otro objetivo del asesoramiento es enseñar a la persona a manejar el estrés, las emociones difíciles, las relaciones que son mejores que ser autodestructivo.
Neuromodulación: el tratamiento de neuromodulación, como la estimulación transcraneal de corriente directa, la estimulación cerebral profunda y la estimulación transcraneal repetitiva como las tecnologías más nuevas, han dado resultados exitosos en el tratamiento de la anorexia nerviosa, incluso en casos graves.
Terapias: los mejores programas de tratamiento para la anorexia nerviosa tienen un enfoque combinado que incluye psicoterapia, terapia familiar, medicina y asesoramiento nutricional. Esto funciona bien para los pacientes que requieren en su salud conductual mediante el desarrollo de una relación saludable con los alimentos.
También son necesarios los masajes, el yoga, la acupuntura y otros tratamientos alternativos.
Es importante que el paciente esté tan involucrado como sea posible en su propio plan de tratamiento, aunque esto puede ser difícil, ya que muchas personas con anorexia niegan la gravedad de su problema.
Complicaciones y efectos secundarios
La anorexia puede causar complicaciones graves y devastadoras, incluso la muerte si no se trata a tiempo. La muerte puede ser el resultado de las complicaciones físicas de la inanición y la desnutrición.
Puede suceder de repente, incluso si alguien no parece estar muriendo de hambre. La muerte a menudo resulta de un ritmo cardíaco irregular (arritmia) o un desequilibrio electrolítico.
Los electrolitos son minerales en el cuerpo humano que tienen una carga eléctrica. Son responsables de mantener la sangre sana y la química celular necesaria para la función muscular y otros procesos.
Las personas obtienen electrolitos como sodio, calcio, potasio y magnesio a través de los alimentos que comen.
Cuando las personas con anorexia practican la auto-inanición, pueden desarrollar un peligroso desequilibrio electrolítico.
Debido a que los electrolitos influyen en el equilibrio de líquidos en todo el cuerpo, un desequilibrio puede causar deshidratación severa e incluso insuficiencia renal.
Cuando el cuerpo no tiene los nutrientes esenciales que necesita para funcionar, comienza a ralentizar todos sus procesos en un intento de conservar energía.
A medida que los latidos del corazón disminuyen y los niveles de presión arterial disminuyen, aumenta el riesgo de insuficiencia cardíaca.
Cuanto más gravemente desnutrida está una persona con anorexia, más peligrosa puede ser. Todos los órganos del cuerpo, incluido el cerebro, pueden dañarse.
Este daño puede no ser completamente reversible, incluso cuando alguien recibe tratamiento.
Otras complicaciones pueden incluir:
- Reducción de la densidad ósea (osteoporosis), que causa huesos frágiles y aumenta el riesgo de fracturas.
- Pérdida muscular y debilidad.
- Deshidratación severa, que puede causar insuficiencia renal.
- Desmayo, fatiga y debilidad general.
- En las mujeres, puede provocar la ausencia de la menstruación.
- En los hombres, puede provocar una disminución de los niveles de la testosterona.
Además de las complicaciones físicas, las personas con anorexia pueden desarrollar varios trastornos psicológicos.
Alrededor de la mitad de todas las muertes relacionadas con la anorexia son por suicidio. Desarrollar trastornos mentales concurrentes solo puede aumentar el riesgo de muerte por suicidio.
Otros trastornos comunes en personas con anorexia incluyen:
- Depresión.
- Ansiedad.
- Trastornos obsesivo-compulsivos.
- Trastornos por abuso de alcohol y sustancias.
Prevención de la anorexia
No hay una manera garantizada en que la anorexia nerviosa se pueda prevenir.
Los médicos de atención primaria pueden ayudar a identificar los síntomas de la anorexia antes de que se convierta en un trastorno. El cuidado de la salud se inicia con una revisión de los hábitos alimenticios.
El paciente debe acudir a un psicólogo si no está satisfecho con su apariencia.
Si se observa que un amigo o miembro de su familia tiene hábitos de dieta severos, baja autoestima y odia su cuerpo en términos de apariencia, se debe recomendar que hablen sobre estos temas y busquen ayuda profesional.
El problema debe tratarse no solo previniéndolo, sino asumiendo un comportamiento saludable, que permita conocer las ventajas de comer alimentos saludables.
