Es una enfermedad crónica y compleja que se presenta cuando el sistema inmune del cuerpo ataca a los propios tejidos y órganos.
La inflamación que causa el lupus puede afectar muchos sistemas como las articulaciones, la piel, los pulmones, el cerebro, los riñones, los vasos sanguíneos y el corazón, lo que provoca la inflamación general afectando los tejidos en los órganos que afecta.
Las perspectivas para las personas con lupus alguna vez fueron desalentadoras, pero el diagnóstico y el tratamiento del lupus han mejorado considerablemente.
Con tratamiento, la mayoría de las personas con lupus pueden llevar vidas activas. Más del 90 por ciento de las personas con lupus son mujeres.
Los síntomas y el diagnóstico ocurren con mayor frecuencia cuando las mujeres están en edad reproductiva, entre las edades de 15 y 45 años.
El sistema inmunitario está diseñado para identificar cuerpos extraños (como bacterias y virus) y atacarlos para mantener el organismo sano.
Sin embargo, en el caso del lupus, el sistema inmune ataca por error el tejido sano, lo que causa inflamación y dolores constantes.
Tipos de lupus
- Lupus eritematoso sistémico: es el tipo más común y grave que afecta los riñones, el corazón, la piel, el cerebro y la sangre. Los síntomas tienen altas diferencias interindividuales en la gravedad y la exacerbación.
- Lupus eritematoso discoide: es una condición crónica de la piel que aparece enrojecida con parches redondos y escamosos que tienden a desarrollarse en áreas expuestas al sol como la cara y las manos. A veces, las lesiones pueden desarrollarse en otras áreas del cuerpo, incluido el cuello y la parte superior de la espalda.
- Lupus inducido por medicamentos: algunos medicamentos pueden provocar síntomas parecidos al lupus eritematoso sistémico, que luego desaparecen una vez que se suspenden los medicamentos. Los medicamentos que se sabe que causan síntomas similares al lupus incluyen los medicamentos utilizados para tratar la presión arterial alta y medicamentos para las anomalías cardíacas.
- Lupus neonatal: esta es una forma rara de lupus temporal que afecta al feto o al bebé recién nacido. Ocurre cuando los auto anticuerpos de una madre con lupus eritematoso sistémico se transmiten al bebé antes del nacimiento. Afectando la piel, el corazón y la sangre del bebé.
Causas
El lupus es una enfermedad autoinmune, lo que significa que en lugar de atacar sustancias extrañas, como bacterias y virus, el sistema inmunológico también se vuelve contra el tejido sano.
Los médicos no saben qué causa las enfermedades autoinmunes, como el lupus.
Se cree que el lupus es el resultado de la combinación genética y ambiente.
Los médicos sostienen que se puede heredar una predisposición al lupus, pero no se hereda la enfermedad.
Las personas con una predisposición heredada para el lupus solo pueden desarrollar la enfermedad cuando entran en contacto con algo en el ambiente que puede desencadenar el lupus, como un medicamento o un virus.
Algunos desencadenantes potenciales incluyen:
- Genética: un historial familiar de lupus puede hacerlo más susceptible a esta enfermedad.
- Infecciones: una infección puede desencadenar el lupus o provocar una reincidencia.
- Luz solar: la exposición a la luz solar puede desencadenar una respuesta en personas susceptibles y provocar lesiones en la piel.
- Hormonas: tanto hombres como mujeres producen estrógeno, sin embargo, su producción es mucho mayor en las mujeres. Muchas mujeres experimentan síntomas de lupus antes de los períodos menstruales o durante el embarazo cuando la producción de estrógenos es alta.
- Medicamentos: ciertos medicamentos, como los medicamentos para la tensión arterial, los anticonvulsivos y los antibióticos, pueden desencadenar el lupus. Estos pacientes generalmente mejoran después de dejar de tomar los medicamentos.
Signos y síntomas
Los signos de lupus se distribuyen a lo largo de varias partes del cuerpo ya que la enfermedad afecta a todos los tejidos y órganos internos del cuerpo.
Los signos del lupus en las primeras etapas de la enfermedad no son específicos y pueden ser causados por otras afecciones.
Sin embargo, no debe pasar por alto ninguno de ellos y se debe consultar con el médico tan pronto aparezcan.
- Fatiga: la fatiga extrema o anormal podría ser una señal de advertencia temprana de lupus. Aproximadamente el 90% de los pacientes diagnosticados con lupus reportan fatiga como síntoma inicial. Tal es el grado de fatiga que realizar actividades habituales puede cansarlo y debilitarlo. Dormir lo suficiente y una dieta equilibrada no parece aliviar la fatiga asociada con el lupus. Puede causar angustia significativa ya que puede interferir con la vida social o profesional.
- Sarpullido: el sarpullido por lupus aparece con mayor frecuencia en la cara, mientras que algunos pacientes pueden presentar manchas violáceas en forma de encaje en las extremidades inferiores. El rasgo característico de la erupción es que se asemeja a la forma de una mariposa. Además, la erupción se agrava aún más por la exposición a la luz solar.
- Dolor en las articulaciones: El dolor afecta especialmente a las articulaciones de las manos y los pies. Se puede experimentar un dolor más intenso por la mañana. El dolor a menudo progresa gradualmente, causando hinchazón notable y dificultad con los movimientos.
- Fiebre sin causa: la fiebre en el lupus es indicativa de inflamación o infección. Puede ocurrir al azar y la temperatura de su cuerpo puede volver al rango normal incluso sin ningún medicamento. Por lo tanto, si tiene fiebre baja sin una causa obvia o si aparece y desaparece con frecuencia, se debe consultar con el médico.
- Dolor en el pecho y problemas para respirar: aunque estos no son signos específicos de lupus, se debe examinar de cerca si persisten o empeoran. El lupus causa hinchazón de los pulmones y los vasos sanguíneos. En consecuencia, se puede experimentar dolor en el pecho al respirar.
El lupus también puede causar uno o más de los siguientes síntomas:
- Convulsiones.
- Presión sanguínea elevada.
- Dolor de cabeza y dolor de estómago.
- Problemas de pensamiento y memoria deteriorados.
- Pérdida de cabello.
- Problemas de memoria.
- Depresión mental.
- Hinchazón en el tobillo debido a la acumulación de líquido.
Aunque el lupus no es un trastorno de género específico, las mujeres de 15 a 45 años tienen más probabilidades de tenerlo en comparación con los hombres del mismo grupo de edad.
Además, el riesgo en las mujeres afroamericanas es tres veces mayor que en las mujeres caucásicas.
Los síntomas del lupus en las mujeres pueden coincidir con otras condiciones de salud que pueden ser muy perjudiciales para la salud.
Las mujeres están naturalmente en mayor riesgo de desarrollar lupus.
Si bien el conjunto de síntomas es similar en hombres y mujeres, ciertos síntomas de lupus en las mujeres necesitan atención adicional.
Esto se debe a que las mujeres están intrínsecamente predispuestas a ciertas condiciones de salud que pueden empeorar con el lupus.
Eventualmente, tal predisposición puede conducir a un aumento de la mortalidad y una calidad de vida deteriorada en ellas. Estos síntomas son:
- Enfermedades del corazón: las enfermedades del corazón son más comunes en las mujeres que en los hombres. Además, el lupus multiplica el riesgo de enfermedades cardíacas. Por lo tanto, el lupus se considera una mayor amenaza para la salud de las mujeres.
- Pérdida ósea: las mujeres pierden su masa ósea en mayor medida que los hombres a medida que envejecen. El lupus o sus medicamentos pueden provocar aún más la pérdida ósea.
- El lupus, en las primeras etapas, puede causar una erupción facial. En la mayoría de los casos, la erupción afecta su cara, particularmente las mejillas y la nariz. La exposición a la luz solar o incluso a la luz artificial puede empeorar la erupción. Se ve en casi la mitad de los pacientes que tienen lupus.
- El lupus es un trastorno sistémico, lo que significa que afecta los órganos internos del cuerpo, algunos pacientes inicialmente desarrollan lupus que está restringido solo a la piel. Esta condición se conoce como lupus eritematoso discoide. Según algunos estudios, los pacientes que padecen de lupus discoide finalmente progresan a lupus sistémico.
- Algunos pacientes también pueden tener marcas de manchas en sus piernas, lo que se conoce como Livedo reticular. Las manchas aparecen como un encaje morado.
Diagnóstico del lupus
El lupus se presenta de muchas maneras diferentes en el cuerpo, por lo tanto, el diagnóstico puede ser complicado.
Los síntomas del lupus pueden simular otros problemas de salud, por lo que se deben descartar otras enfermedades antes de hacer un diagnóstico final.
De hecho, esta enfermedad se conoce como «el gran imitador» ya que sus síntomas se asemejan a muchas otras enfermedades. Por lo general, un médico general puede diagnosticar lupus.
Dependiendo de la gravedad de su afección, puede derivarlo a otros especialistas, como un dermatólogo, un cardiólogo, un nefrólogo, un neurólogo, un gastroenterólogo, un neumólogo o un perinatólogo.
El diagnóstico se basa en pruebas de imágenes clínicas, así como en resultados de laboratorio y biopsias.
Para diagnosticar el lupus, se buscarán síntomas actuales, como dolor, calor, enrojecimiento, hinchazón y pérdida de la función en un lugar particular del cuerpo.
Debe revisar el historial médico completo y si existen antecedentes familiares de lupus.
No existe una única prueba de diagnóstico para el lupus sistémico, sin embargo, la prueba generalmente sugerida por los médicos para el lupus se llama prueba de anticuerpos antinucleares.
Esta no es una prueba específica para el lupus, pero con esta prueba, junto con muchas otras pruebas de laboratorio, se puede crear una imagen que brinde más información al médico y, finalmente, confirme si se trata de lupus.
Otros tipos de pruebas incluyen:
- Una evaluación renal y hepática.
- Una radiografía de pecho.
- Un eco cardiograma.
- Una biopsia de piel.
Pruebas de diagnóstico
Pruebas de sangre y orina
- Recuento sanguíneo completo: este examen mide la cantidad de glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas y la cantidad de hemoglobina en la sangre. Los resultados indican si el paciente tiene anemia que es un signo muy común cuando hay lupus. También puede presentarse un recuento bajo de los glóbulos blancos o las plaquetas en el lupus.
- Tasa de sedimentación globular: esta prueba de sangre establece la velocidad de sedimentación de los glóbulos rojos. Esto no es un resultado específico de ninguna enfermedad, pero se eleva cuando el paciente padece de una afección inflamatoria, un cáncer o cualquier otra infección.
- Evaluación renal y hepática: las pruebas hepáticas miden proteínas, enzimas, y sustancias como la albúmina, la proteína total, las enzimas que se encuentran en el hígado (incluyendo la alanina aminotransferasa, aspartato aminotransferasa, fosfatasa alcalina y gamma-glutamil transpeptidasa), la bilirrubina y el tiempo de protrombina.
- Prueba de anticuerpos antinucleares: esta prueba se realiza para verificar si el paciente padece de un trastorno inmunitario. Si la prueba es positiva, el médico puede recomendar pruebas de anticuerpos más específicas.
Pruebas de imagen
Si el médico sospecha que el lupus está afectando los pulmones o el corazón, puede sugerir:
- Radiografía de tórax: una imagen de rayos X del tórax puede revelar sombras anormales que sugieren la presencia de líquido o inflamación en los pulmones.
- Eco cardiograma: con esta prueba se puede verificar si hay problemas cardíacos.
Biopsia
El lupus puede dañar diversos órganos, como la piel, los riñones, el cerebro y otras partes del cuerpo de muchas maneras diferentes.
El enfoque de tratamiento puede variar, dependiendo del tipo de daño y la parte afectada.
La muestra se puede obtener con la ayuda de una aguja o mediante una pequeña incisión.
Este proceso de recolección de muestra de tejido se conoce como biopsia.
Tratamiento del lupus
El lupus cambia con el tiempo y todos responden al tratamiento de manera diferente. Como tal, el cuidado de pacientes con lupus requiere vigilancia y atención al detalle.
El objetivo del tratamiento es limitar la lesión inflamatoria de los tejidos, utilizando una amplia gama de opciones terapéuticas, desde simples medicamentos antiinflamatorios hasta la terapia «inmunomoduladora» que ralentiza la respuesta inmune a los tratamientos «citotóxicos» que matan las células inmunes.
Cuanto más fuerte sea la medicina, mayor es el riesgo, y una gran parte del control del lupus implica determinar el enfoque apropiado para el estado actual de la enfermedad.
Aunque la mayoría de las personas con lupus requieren una atención especial y tomar medicamentos, un estilo de vida saludable tiene un gran impacto en el curso de la enfermedad y debe ser la base sobre la cual se construye la intervención médica.
Como no hay cura, el tratamiento del lupus tiene como objetivo reducir la gravedad de los síntomas y preservar la calidad de vida. Es posible aliviar los síntomas y prevenir la aparición de brotes.
El tratamiento de lupus es un esfuerzo de colaboración realizado por un equipo de profesionales de la salud.
El plan de tratamiento implica el control regular de los síntomas y su respuesta a medicamentos particulares.
Los medicamentos que constituyen el plan de tratamiento de lupus incluyen:
- Medicamentos para el dolor: puede tomar analgésicos de venta libre para aliviar el dolor y reducir la hinchazón. Además, el médico puede recetar algunos medicamentos para el dolor más fuertes si los analgésicos de venta libre no brindan el alivio esperado.
- Medicamentos inmunosupresores: estos agentes reducen la función inmune y pueden ayudar a tratar casos severos. Sin embargo, hacen que seas más susceptible a las infecciones y también pueden dañar el hígado. Por lo tanto, se deben tomar precauciones al tomar cualquiera de ellos y seguir las instrucciones del médico.
- Medicamentos contra la malaria: los agentes antipalúdicos son particularmente efectivos para reducir el dolor articular , las erupciones cutáneas, la fatiga y la inflamación de los pulmones. Modifican el sistema inmune, por lo tanto, hacen que los síntomas sean más manejables.
- Medicamentos esteroides: los esteroides ayudan a reducir la inflamación y también afectan el sistema inmunológico. La terapia con esteroides a largo plazo tiene su propia parte de los efectos secundarios dañinos. Se debe aprender sobre el uso adecuado.
El lupus es una enfermedad de larga duración con periodos de brotes. Comprensiblemente, el tratamiento puede durar mucho tiempo.
Es posible que también deba tomar más de un medicamento para controlar los síntomas y prevenir los brotes.
Por lo tanto, debe tener especial cuidado para reducir la incidencia de los efectos adversos de los medicamentos y las posibles interacciones entre los medicamentos.
Las terapias alternativas o complementarias también pueden ser beneficiosas en el tratamiento del lupus. Sin embargo, estas terapias generalmente se usan junto con medicamentos convencionales.
Es muy recomendable discutir estos tratamientos con su médico antes de comenzar.
Los tratamientos complementarios y alternativos más comunes para el lupus incluyen:
- Dehidroepiandrosterona: se ha demostrado que los suplementos que contienen la hormona dehidroepiandrosterona reducen la dosis de esteroides necesarios para estabilizar los síntomas en algunas personas que tienen lupus.
- Aceite de pescado: los suplementos que contienen aceite de pescado son ricos en ácidos grasos omega-3 y suelen ser beneficiosos para los individuos que padecen de lupus.
- Vitamina D: existen evidencias de que la vitamina D puede ser beneficiosa para las personas que padecen de lupus.
Complicaciones
Algunas de las principales complicaciones del lupus incluyen:
- La anemia.
- El riesgo de sangrado o coagulación de la sangre.
- Los dolores de cabeza.
- El mareo.
- Los cambios de comportamiento.
- Las alucinaciones.
- Las convulsiones.
- La inflamación del músculo cardíaco y el incremento del riesgo a enfermedades cardiovasculares y ataques cardíacos.
