Se refiere a un inicio brusco, en referencia a una enfermedad.
Con frecuencia, la enfermedad aguda también implica una enfermedad de corta duración, que progresa rápidamente y que necesita atención de urgencia.
Las condiciones agudas son severas y de inicio repentino. Esto podría describir cualquier cosa, desde un hueso roto hasta un ataque de asma.
Una condición crónica, por el contrario, es un síndrome de larga evolución, como la osteoporosis o el asma. Tenga en cuenta que la osteoporosis, una afección crónica, puede causar la rotura de un hueso, una afección aguda.
Un ataque agudo de asma ocurre en medio de la enfermedad crónica del asma.
Las afecciones agudas, como un primer ataque de asma, pueden conducir a un síndrome crónico si no se tratan.
También, la palabra “aguda o «agudo» es una medida de la escala de tiempo de una enfermedad y está en contraste con «subagudo» y «crónico».
Lo «subagudo» o «subaguda» indica una duración más larga o un cambio menos rápido. Lo»crónico» o «crónica» indica duración indefinida o prácticamente ningún cambio.
La escala de tiempo depende de la enfermedad particular. Por ejemplo, un infarto agudo de miocardio (ataque cardíaco) puede durar una semana, mientras que un dolor de garganta agudo puede durar solo uno o dos días.
La diferencia entre condiciones agudas y crónicas
- El término «aguda» significa una enfermedad que dura menos de seis meses.
- El “crónico» significa que dura un largo período de tiempo. En medicina, una enfermedad puede considerarse crónica si ha durado seis meses o más.
Condiciones agudas contra crónicas
La mayoría de las enfermedades se clasifican como agudas o crónicas. Esta etiqueta ayuda a determinar el tipo de tratamiento necesario, cuánto tiempo se puede esperar que dure el tratamiento y si es apropiado.
La definición general de una enfermedad aguda es una que se espera que sea breve. Normalmente, la etiqueta de enfermedad aguda significa que se espera que un problema se resuelva en menos de seis meses.
Para una enfermedad crónica, seis meses o más se considera el tiempo estándar para que se produzca el tratamiento.
Una enfermedad recién diagnosticada puede ser etiquetada como crónica si no hay una expectativa de mejoría o cura.
La artritis, por ejemplo, es una afección crónica que generalmente no desaparece después del diagnóstico, pero solo puede tratarse para minimizar el daño y el dolor que se produce a medida que la afección empeora.
La enfermedad aguda puede volverse crónica y la crónica puede volverse aguda
Una lesión aguda puede convertirse en crónica, y viceversa. Es mucho más deseable que una enfermedad crónica se vuelva a etiquetar como un problema agudo, en lugar de lo contrario.
Por ejemplo, una pierna rota se considera un problema agudo, pero si el hueso está muy roto o no se cura bien, el dolor asociado con la fractura puede convertirse en un problema crónico de por vida.
La diabetes tipo 2 se considera un diagnóstico crónico a largo plazo con una expectativa de tratamiento de por vida.
Se pudiera imaginar que un paciente a quien se le diagnostica diabetes tipo 2, pero que sigue los consejos del proveedor de atención médica y pierde más de cien libras, comienza a comer una dieta muy saludable y hace ejercicios una hora al día.
Varios meses después, se le dice al paciente que ya no tiene diabetes tipo 2 y que ya no necesita tratamiento para la afección. Se esperaba que este diagnóstico fuera crónico, pero se convirtió en una afección aguda.
Además, tanto las enfermedades agudas como las crónicas pueden curarse con tratamientos que incluyen medicamentos y cirugía.
Para un paciente con dolor crónico de cadera, un reemplazo de cadera puede curar el problema, y después de que el dolor agudo de la cirugía haya desaparecido y la recuperación haya finalizado, el paciente se sentirá bien.
¿Cuáles son los síntomas de una enfermedad aguda?
Algunos ejemplos incluyen el virus de la influenza y el resfriado común.
Las enfermedades agudas pueden incluir estos síntomas comunes:
- Fiebre.
- Dolor de garganta.
- Tos.
- Estornudo.
- Dolor de oídos.
- Diarrea.
- Nariz con secreción.
- Náuseas.
- Erupción.
- Dolor de cabeza.
A través de un examen físico y la identificación de sus síntomas, su médico puede proporcionarle un diagnóstico y un plan de tratamiento individualizado para atender su enfermedad aguda.
Enfermedades agudas graves
Muchas enfermedades agudas pueden ser autolimitadas y pueden desaparecer por sí solas, o pueden tratarse con un simple curso de antibióticos u otros medicamentos recetados.
Sin embargo, hay algunas enfermedades agudas que aparecen repentinamente y producen síntomas que amenazan la vida.
Éstos incluyen:
- Ataque al corazón.
- Ataque de asma.
- Neumonía.
- Apendicitis.
- Falla de un órgano.
- Bronquitis aguda.
Estas enfermedades agudas más graves requieren atención médica urgente. Si sospecha que puede tener una enfermedad aguda grave, es importante que llame al 911 o vaya a la sala de emergencias local.
Al buscar tratamiento para su enfermedad aguda lo antes posible, disminuye la posibilidad de complicaciones adicionales u otros problemas de salud a largo plazo.