Este es un tipo muy común de fobia y evita que las personas vayan a lugares como ferias, circos y parques temáticos por miedo a los payasos.
Algunas personas que tienen esta fobia incluso le temen a Santa Claus.
La coulrofobia se considera una fobia específica. Podemos definir la coulrofobia como el miedo persistente e irracional a los payasos.
La palabra «payaso» puede haber evolucionado de «cloyne», «clod» o «colonus», que significa pamplina, granjero, paleto o alguien que carece de sentido común.
La palabra coulrofobia tiene su raíz de la palabra griega ‘kolon’ que significa ‘zancos’ que a menudo son usados por los payasos y la palabra ‘fobia’ viene de la palabra griega ‘phóbos’ que significa ‘miedo’.
Causas de la coulrofobia
Muchos creen que la causa de la coulrofobia es un evento traumático en la primera infancia.
Estos puedes ser un desencadenante de eventos futuros. Algunas de las cosas más mundanas pueden ser muy aterradoras en nuestros primeros años, digamos de 2 a 7 años de edad.
Los incidentes reales y aterradores podrían ser olvidados por algún tiempo, pero puede causar una ansiedad o una fobia más tarde en la vida del individuo.
La coulrofobia es una fobia específica (o «aislada»), centrada en factores claves, no sociales.
Tales fobias tienden a tener algún trauma previo (a menudo en la infancia y, a menudo, físicamente perjudicial) como causa raíz, el miedo a las abejas puede deberse a una lesión en la infancia.
La crianza también puede desempeñar un papel, como las advertencias de los padres sobre una amenaza directa, que es especialmente notable en los casos en que una amenaza es más inminente.
Una alergia a las abejas o la mantequilla de maní, por ejemplo, naturalmente reforzaría una preocupación médica real.
La genética y los factores hereditarios también pueden desempeñar un papel importante en las fobias específicas, especialmente aquellas relacionadas con algún peligro de lesión.
Un reflejo primario de «lucha o huida» puede desencadenarse más fácilmente en aquellos que poseen una predisposición genética, para ello.
Las experiencias externas refuerzan o desarrollan el miedo, en este tipo de fobias, sobre todo cuando es un miembro de la familia o un amigo cercano.
En casos extremos, las noticias, la televisión, las películas, pueden tener un efecto negativo en la coulrofobia.
Como en la mayoría de las fobias, la coulrofobia es un mecanismo subconsciente de sobreprotección, que se arraiga en un conflicto emocional no resuelto.
Síntomas
La coulrofobia es una de las 10 fobias más comunes.
Los síntomas pueden variar desde ataques de ansiedad, hasta ataques de pánico, cuando se está en presencia de personas con trajes de payaso u otra vestimenta extraña y maquillaje, incluso vestimentas de Santa Claus.
Dentro de los síntomas más comunes que se presentan ante la idea o contacto con un payaso se encuentran:
- La ansiedad extrema.
- El pánico.
- La falta de aliento.
- Presencia de respiración rápida.
- Fuertes palpitaciones del corazón.
- Sudoración excesiva.
- Las náuseas.
- La boca reseca.
- Confusión e incapacidad para articular claramente.
- Falta de concentración.
- La irritabilidad.
- Los temblores.
- Aparición de sentimientos de impotencia.
- Obsesión con el tema de la fobia.
- Miedo o sentimientos de pérdida de control.
- Comportamiento de evitación.
- Dolores de cabeza.
Tratamientos para la coulrofobia
El camino hacia la recuperación comienza con el aprendizaje de los mecanismos de adaptación, como las técnicas de distracción, los ejercicios de respiración, técnicas de meditación y las estrategias de hábitos para la relajación.
Luego, con la terapia cognitiva conductual y la terapia de exposición, el paciente progresará.
El primer paso de estas terapias sería la presentación al paciente de pequeñas imágenes de payasos felices, no de los payasos de terror de las películas como el payaso de la película “Eso”, después de que la persona se sienta cómoda, se le mostraran gradualmente imágenes más grandes y luego se agregará algunas de las imágenes de payaso más dramáticamente vestidos.
Después de eso se consideraría un encuentro con un payaso o un amigo vestido con un traje de payaso. Una persona que se conoce y es muy cercano no le provocará ningún tipo de angustia adicional.
Luego, cuando el paciente se sienta cómodo, progresará hasta tener encuentros con payasos desconocidos hasta que se sienta cómodo en estas situaciones.
El tratamiento también puede incluir medicamentos, hipnoterapia y varias terapias como las terapias de grupo, la psicoterapia, la psicología energética, diseñadas para enfrentar la coulrofobia hasta que el paciente maneje la situación de manera más racional.
A menos que esta fobia sea extremadamente severa, es probable que sea un enfoque menos intrusivo para evitar payasos y otros factores desencadenantes.
Si es necesario enfrentar este miedo por principio, debe hacerse gradualmente y con mucho cuidado. No tome el enfoque de inmersión completa, pero sumérjase en el agua un dedo a la vez.
Las condiciones de salud mental pueden ser limitantes y muy dolorosas.
No hay curas garantizadas ni soluciones rápidas, ya sean terapias, medicamentos, nutrición, hierbas o cualquier otra cosa.
